Crímenes desde

Las cárceles

La sociedad dominicana creía superada la práctica de dirigir organizaciones criminales y de narcotraficantes desde las cárceles. Sin embargo, las acciones del fin de semana donde la Policía mató a Rubén Junior y a Francisco Javier Rodríguez, que luego el Ministerio Público admitió pertenecían a una banda que dirigía desde la prisión el narcotraficante Jesús Pascual Cabrera, es una señal que debe encender la alarma sobre el tema carcelario. Aunque a este caso hay que sumar al menos otros.

Recuerden el atentado contra Jordi Veras el 2 de junio de 2010, ordenado desde la cárcel por el empresario Adriano Román. También el 24 de mayo de este año, fue ordenada desde la cárcel de San Francisco de Macorís el asesinato de Blas Belén Vásquez y Yaritza Rocha.

Estos hechos son apenas un botón de lo que pasa en las cárceles dominicanas, donde se puede adquirir desde el más sofisticado tipo de drogas hasta la más moderna arma de fuego. Allí el comercio es público y se sabe de reclusos que han acumulado fortuna haciendo negocios en el interior de los recintos penitenciarios. Lo que pasó el fin de semana fue un hecho sin precedente, ya que hubo que usar 20 fiscales, 200 policías y extender los operativos desde la capital a La Romana, Santiago y San Francisco de Macorís.

El control de las cárceles es otro de los retos que aún tienen pendientes las autoridades con la sociedad. Con la delincuencia que hay en las calles es suficiente, por lo que no es necesario que haya que agregar las cárceles.