Pareciera como si el guión estuviera preparado para que estos equipos, Cardenales y Gigantes sean los representantes de la Liga Nacional en la Serie Mundial. Ningún otro club del Viejo Circuito ha jugado en el Clásico de Otoño en el primer lustro de la década actual.
Las dos tradicionales franquicias, de las más ganadoras en la historia, se han adueñado del negocio desde que los Filis de Filadelfia sucumbieron ante los Yankees de Nueva York en la última instancia en el 2009 y se preparan para definir cuál de los dos se mantendrá en pie.
San Francisco consiguió los cetros mundiales al destrozar a los Vigilantes en el 2010 y destruir a los Tigres en el 2012. San Luis superó a los Rangers en el 2011 y cayó ante los Medias Rojas la temporada pasada.
Por segundo año seguido, el Busch Stadium fue el escenario en el que los pájaros rojos dejaron en el camino al equipo de la nómina más elevada de las Grandes Ligas, los Dodgers de Los Angeles, y al premier de los lanzadores, Clayton Kershaw.
Sólo tres bateadores bastaron para poner punto final al trabajo del zurdo de los Dodgers que llegó con ventaja de 2-0 en el séptimo y tirando pelota de un hit y nueve ponches. Matt Holliday y Jhonny Peralta comenzaron con sencillos y Matt Adams capturó una curva que se colgó por el medio del plato para poner su equipo delante 3-2. Esos tres bateadores le habían conectado limpiamente al líder de efectividad en la debacle del inning siete el viernes pasado.
Así, los Dodgers hundieron en lágrimas el sur de California que el domingo había sufrido el revés de los Angelinos, terminando con el chance de una Serie Mundial del Freeway.
En la bahía, los vientos soplaron a favor de los dueños de la casa. Los capitalinos Nacionales de Washington no se comportaron como el equipo que más victorias obtuvo en el Viejo Circuito entre abril y septiembre. La segunda entrada fue devastadora porque el abridor Gio González no pudo manejar una débil rolata por sus predios salida del bate de Juan Carlos Pérez.
Como si eso fuera poco, por las bocinas del parque se anunció que el pitcher Ryan Volgelsong se sacrificaría, pero el toque se convirtió en sencillo que llenó las bases y posteriormente, González procedió a conceder una carrera forzada por transferencia.
La vuelta decisiva llegó en el séptimo, el fatídico séptimo, por un lanzamiento desviado del novato Aaron Barrett también con las bases llenas. Y así señoras y señores, se puso fin a la posibilidad de un Clásico de Otoño en las cercanías de la Casa Blanca y todos los símbolos del poder norteamericano.
El revés de los Nacionales eliminó la posibilidad de la serie del Beltway como se le llama a los partidos interligas entre Washington y Baltimore y ahora sólo se mantiene en pie la posibilidad de repetir el Clásico del 1985 jugado entre equipos cuyas ciudades se unen por la autopista I-70, San Luis y Kansas City, enclavados en el estado de Missouri.
DATOS.– Con dos en circulación, Matt Williams prefirió utilizar al novato Aaron Barrret con la temporada en la línea a pesar de ser un relevista que tuvo WHIP de 1.30 gracias a 33 hits y 20 BB en 40.2 episodios. El dirigente de los Nacionales esperó por los ponches del tirador que se llevó 49 por esa vía en la serie regular, pero con un mar de toallas naranjas en el AT&T Park, el joven de inmediato concedió una transferencia y lanzó un wild pitch que permitió la vuelta del triunfo. Luego concediendo un pasaporte intencional lanzó otro pitcheo desviado y gracias a sus habilidades cubriendo el plato evitó otra carrera. Un movimiento pésimo de Williams, quien tenía en el bullpen al veterano Rafael Soriano y al de rotación Stephen Strasburg que fue guardado para tirar en los entrenamientos. Playoff es playoff y cuando se está rumbo al despeñadero se dirige de manera diferente…Clayton Kershaw tiene 1-5, 5.12 en 11 partidos de postemporada y no hay manera de que la mayoría no lo incluya entre los que no resuelven a la hora de la verdad. Con 26 años tendrá otras oportunidades, pues las circunstancias no han estado a su favor a pesar de que ayer tiró seis innings bestiales, mismo que en el primer partido, pero lo que se recordará serán los palos de los Matt, Carpenter y Adams…San Luis le ha ganado cuatro juegos consecutivos a Kershaw en postemporada. Ah, la pelota…Scott Rolen lanzó la primera bola en el Busch Stadium. Jugó con dos equipos de San Luis en la Serie Mundial, pero sus relaciones con el manager Tony LaRussa no terminaron bien… La última vez que la ciudad de Washington vio una Serie Mundial fue en 1933 cuando los Senadores, no es la misma franquicia, perdieron 1-4 ante los Gigantes de Nueva York, la franquicia que se mudó a San Francisco en 1958… Jorge Posada jugó 119 partidos de postemporada, líder entre los catchers seguido de Yadier Molina, quien tiene 84 y sumará por lo menos cuatro más… Bryce Harper es devastador, por lo menos ahí están bien plantado los Nacionales
CITAS.- “La temporada terminó y yo fuí gran parte de la razón de por qué. Realmente esto no lo puedo poner en palabras. Había tenido éxito contra ellos, solo que ahora siempre hay un inning que me pasa factura”, dijo Clayton Kershaw luego de caer ante San Luis por segunda vez en la serie.

