CRÓNICA DEL PRESENTE Opinión

¡Sánchez!

¡Sánchez!

Euclides Gutiérres Félix

(II)

A esa reunión asistieron Francisco del Rosario Sánchez, Mella, Vicente Celestino Duarte (hermano de Juan Pablo), Juan Alejandro Acosta y otros. A proposición de algunos de sus compañeros entre los cuales figuraron Félix Mercenario, Manuel María Valverde, Manuel Jiménez y Mariano Echevarría, se convino que Sánchez presidiera la junta de Gobierno que debía dirigir los destinos de la naciente república.

Es significativo señalar que los proponentes y la totalidad de los que aceptaron, en términos sociales, tenían más categoría que Francisco del Rosario, pero eso no les impedía reconocer las condiciones de liderato del joven conjurado. Investido de esa autoridad, comparece la noche del 27 a la apertura de El Conde y encabeza todas las actividades.

En la madrugada del 28 sus manos juveniles, apenas tenía 27 años, izan la bandera nacional al amparo del lema de ¡Dios, Patria y Libertad!.

En ese momento inmortal, presidida por Francisco del Rosario Sánchez, quedó fundada la República Dominicana. Proclamada la Independencia, es reorganizada la Junta Central Gubernativa y se impone los representantes del sector social más influyente. Surge el oportunismo y comienzan las maniobras y zancadillas propias de este tipo de lucha por el control de la dirección política. Tomás Bobadilla sustituye a Sánchez en la presidencia.

La junta ordena el regreso de Duarte y toma diferentes medidas para asegurar el control de la situación. Ofrece garantías a los ciudadanos haitianos domiciliados y califica como delincuente a todo aquel que propagare el rumor de que la esclavitud será restablecida.


Sus miembros más importantes mantienen comunicación permanente con el cónsul francés. Bobadilla y Sánchez lo visitan, y en sus informes Saint Denys dice: a las 7 de la mañana estaba –Bobadilla- en mi gabinete acompañado por el joven Sánchez, el jefe del Partido Revolucionario…, es decir, el jefe en esos momentos frente a la ausencia de Duarte, de los patriotas republicanos.

Para entonces, como representantes auténticos de ese ideal en la Junta Central Gubernativa, solamente estaban Sánchez y Matías Ramón Mella. La traición y la falta de fe en la viabilidad de la República tenían la mayoría. El 14 de marzo arriba Duarte al Puerto del Ozama. Sánchez y Mella suben a bordo de la goleta a recibir al compañero y líder del Movimiento.

Duarte se integra a la Junta y, nombrado General de Brigada, es destinado a Azua junto a Pedro Santana que hace días funge de general en jefe del naciente Ejercito Libertador.

Comienzan las contradicciones y los sucesos internos de Haití les dan un respiro a los dominicanos. Mella, actuando en el Cibao Central como jefe político y militar, recibe a Duarte y lo proclama presidente de la República en una decisión precipitada y emotiva. Se rompe el precario equilibrio que imperaba en el gobierno colegiado, en el cual los republicanos eran mayoría, y se produce un golpe de Estado que lleva a la presidencia a Francisco del Rosario Sánchez. La Junta integrada por patriotas republicanos es desconocidas por Pedro Santana quien regresa de Azua y toma la ciudad de Santo Domingo, Reducidos a prisión, algunas voces proponen que sean fusilados.

El 22 de agosto de 1844, apenas seis meses después de haber sido fundada la República, sus auténticos gestores, encabezados por Duarte, Sánchez y Mella, son declarados traidores a su propia obra política y expulsados de por vida del territorio nacional. Continuaremos….