Santo Domingo.-Durante la sesión de este miércoles, el Senado aprobó una resolución que solicita a la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril), que se incorpore la cobertura de la prueba mediante biomarcadores para la detección de riesgo de nefropatía diabética.

Por la importancia que reviste la resolución, el senador de la provincia Hermanas Mirabal, Bautista “Bauta” Rojas, instó al presidente del Senado, Eduardo Estrella, a dar seguimiento y motivar que se logre la incorporación por parte de la Sisalril.

“Esta prueba va a prevenir muchas muertes y le va a ahorrar mucho dinero al Estado dominicano”, aseguró el también exministro de Salud Pública y proponente de la iniciativa.

La referida prueba orientada a los pacientes que padecen de diabetes mellitus tipo dos, sería aplicada en la frecuencia que sea requerida en virtud de la condición de cada paciente y según el protocolo de periodicidad de dicha prueba y que establezcan los profesionales de la salud.

En uno de los considerandos, la pieza establece que el 29 de julio de 2021, el Ministerio de Salud Pública dio a conocer los resultados de un estudio sobre incidencia de la hipertensión, diabetes, sobrepeso y otras enfermedades crónicas, detectadas durante la primera Jornada Nacional de Hipertensión Arterial, realizada en el territorio nacional, entre los meses de mayo y junio del 2021.

De igual modo, la resolución plantea que la Organización Panamericana de la Salud (OPS), como Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), define la diabetes como una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre (o azúcar en sangre), que con el tiempo conduce a daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios. La más común es la diabetes tipo dos, generalmente en adultos, que ocurre cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina o no produce suficiente insulina.

Estudios recientes en el extranjero han establecido que la nefropatía diabética (ND) o enfermedad renal crónica (ERC) atribuida a la diabetes ocurre en el 20-40 % de los pacientes con diabetes y que es la principal causa de enfermedad renal terminal; Se estima que el 27.9 % de los pacientes con diabetes tipo 2 (DM2) tienen ERC3. Motiva la resolución.

La nefropatía diabética es completamente asintomática hasta que se produce un daño grave, por lo que, cuando se detecta, es prácticamente irreversible. Esta realidad determina la importancia de la detección temprana de la nefropatía diabética, de modo que se pueda evitar su progresión y efecto mortal en los pacientes. Argumentó el senador Rojas Gómez.

El representante de Hermanas Mirabal, y exministro de Salud Pública, aseguró que desde el año 2018, está disponible una prueba de sangre en base a biomarcadores, que predice el riesgo de nefropatía en diabéticos que aún no presentan alteraciones en las pruebas estándares usadas hasta ahora, y que el análisis de la prueba de biomarcadores refleja que esta puede predecir la enfermedad renal diabética, por lo que tiene el potencial de facilitar estrategias de manejo preventivo que conllevan a mejorar el cuidado del paciente y sus resultados.

La iniciativa motiva que la prevención temprana permite que se puedan tomar medidas clínicas o cambios al estilo de vida para evitar que el riesgo de daño renal avance y el paciente deteriore su salud hasta padecer de fallo renal terminal, que lo lleve a terapias de diálisis o trasplante renal.

Finalmente, el senador Rojas expresó que el consenso clínico sobre el uso de biomarcadores para la detección de riesgo de nefropatía diabética del 2021, expone los siguientes datos para la República Dominicana, uno de cada tres diabéticos, desarrollará la enfermedad renal diabética; el 90% de la función renal se puede perder sin experimentar ningún síntoma, y que la nefropatía diabética está asociada a una morbi-mortalidad temprana, siendo la causa fundamental de insuficiencia renal, ´por tal razón, el sistema de salud dominicano debe procurar la cobertura de esta prueba para los pacientes que padecen diabetes tipo dos, lo que garantizará un adecuado y oportuno diagnóstico de una eventual enfermedad renal, al tiempo que constituirá un futuro y exponencial ahorro económico para el presupuesto nacional en materia de salud, tomando en consideración el alto costo asociado al tratamiento de la enfermedad renal.

La iniciativa, a la cual se sumaron más de diez senadores como coproponentes, contó con el voto unánime de de los 23 legisladores presentes.