La prensa y el COD

Por respeto a la verdad, debo decir que solía tener conversaciones fluidas con Antonio Acosta, Colin y nunca le escuché decir, ni siquiera insinuar, una expresión que hoy sus amigos y algunos contrarios le critican acremente. ¿Y cuál es esa expresión? Pues cuentan que cuando Acosta recibe críticas de algunos periodistas, suele decir: ‘’ Yo no le paro a eso, la prensa no vota’’.

En caso de que el señor Acosta esté convencido de ese razonamiento, pienso que no debe criticarse, pues ciertamente, la prensa no vota, aunque sí tiene el deber ineludible, no solamente de entretener, sino de formar una opinión pública fundamentada en principios y valores que defienden la honestidad y la transparencia.

A través del crítico social, Thomas Carlyle, conocimos que fue Edmund Burke, quien gritó en el parlamento inglés, que la prensa era el cuarto poder. El rol de la prensa estuvo muy atado en su nacimiento al aspecto social y político.

Ni el barón, Pierre de Coubertin, tenía la mínima idea de que el deporte se iba a convertir en toda una industria multimillonaria que arrastraría a muchos dirigentes olímpicos a casos repugnantes de corrupción.

Ante el avance del deporte y su incidencia en la sociedad, la prensa deportiva se hizo imprescindible y hoy se le agradece las denuncias sobre los mega casos de corrupción como el llamado: FIFAgate.

En el caso de la República Dominicana, es cierto, la prensa no vota en los organismos olímpicos. El amigo Antonio Acosta, Colin, en caso de sostener ese criterio, insisto, tiene la razón, para eso existe la ACD—Y precisamente, hoy están ejerciendo el voto.

Ahora bien, es un deber irrenunciable de la prensa deportiva, saber qué hace el Comité Olímpico Dominicano con casi 70 millones de pesos. Es deber de la prensa, saber por cuáles razones, los miembros del COD: Luis Chanlatte y Rafael Villalona, renunciaron de la comisión que administra los fondos de solidaridad olímpica, que dirige Gilberto García, secretario general del COD.

La prensa ha sido una gran aliada del COD. Fue decisiva para que el país montara los Juegos Panamericanos del 2003 y ha defendido su causa. Ha sido consecuente con el deporte dominicano. Ha proyectado a los atletas y sus dirigentes.

Pienso que ante la renuncia de Luisin Mejía, es imprescindible, hacer todas las denuncias necesarias para evitar el colapso de una entidad que navega en una crisis de credibilidad.
En los lugares públicos, nunca he escuchado a nadie preguntar, si la prensa vota en el deporte, lo que sí oigo es a la gente preguntar: ¿Qué está pasando en el Comité Olímpico Dominicano?.

Por: Ramón Rodríguez
centrodeidiomaswashington@gmail.com