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Articulista invitado:
Santiago Castro Ventura.- () El 18 de agosto de 1891 los médicos dominicanos decidieron agruparse en una asociación para defender la salud de la población, notablemente perjudicada porque el tirano Ulises Heureaux, gobernante de turno, fomentaba el ejercicio ilegal de la medicina para favorecer a curanderos partidarios políticos suyos. Ese día fue creada la Sociedad Médica Dominicana, hoy, Colegio Médico Dominicano. Para desarrollar esta actividad los médicos graduados fueron convocados al local de la Sociedad Amigos del País, frente al Parque Colón de Santo Domingo.

A la histórica reunión asistieron 15 profesionales del área, que constituían la mayoría de los graduados de la época. El doctor Manuel Durán Bracho, venerable médico venezolano, fue escogido como presidente por su condición de maestro de la mayoría de los médicos graduandos presentes en la asamblea.

Se recuerda que la Universidad estaba cerrada desde 1822. En 1869 había sido creada una cátedra de medicina, a partir del año siguiente Durán Bracho se hizo cargo de la cátedra siendo maestro de los primeros médicos graduados en la República Dominicana.

En agradecimiento sus alumnos lo eligieron presidente del gremio. Entre los principales propósitos de la entidad se destacaban impulsar el adelanto de las ciencias médicas y denunciar ante el Juro Médico el ejercicio ilegal de la medicina (una especie de código sanitario que regulaba los saberes y las prácticas del ejercicio profesional). Era muy difícil la normalización de las prácticas en salud toda vez que el primer mandatario auspiciaba por politiquería esta aberración.

El año siguiente, ante las presiones de la Sociedad Médica, se designó un nuevo presidente, el doctor Juan Francisco Alfonseca, quien llegó a advertir públicamente que la Sociedad Médica no estaba muerta, que viviría a pesar de todo. No obstante ante la coacción procedente de la esfera gubernamental, la entidad entro en receso.

Fruto de las vicisitudes políticas de ese periodo, y el acoso de los grupos hegemónicos, y después de la tiranía, la Sociedad Médica se mantuvo, con altas y bajas. En 1906 los médicos libraron una histórica batalla en contra del ejercicio ilegal de la medicina. Esto dio al traste y en medio de la crisis renunciaron los miembros del juro médico en dos oportunidades.

A seguidas el gobierno designó una nueva comisión que se hiciera cargo del organismo. También renunciaron y estos galenos, fueron sometidos a la justicia. () Médico Pediatra. Expresidente del CMD. Miembro de la Academia Dominicana de la Historia.

Por: César Mella
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