Aunque no abracemos la bandera del pesimismo ante el deterioro vertiginoso de la sociedad dominicana en todos sus niveles, es perentorio abrir un espacio para reflexionar profundamente sobre nuestro futuro.

El nuevo paradigma tecnológico ha arropado nuestro país y nos hemos convertido en una sociedad de ‘’Like’’, donde sólo se busca la aprobación de un ‘’me gusta’’, aunque se rompan los códigos de ética, llegando a niveles de insensibilidad nunca vistos.

El lamentable suceso que envolvió a dos familias dominicanas, donde el joven Joshua Omar Fernández perdió la vida y tres jóvenes implicados, cumplen medida de coerción, incluyendo el hijo del influencer ‘’ Dotol Nastra’’, sacó a relucir que la búsqueda de un ‘’Like’’ está por encima del grado de solidaridad que deben exhibirse en caso tan lamentable como ese.

Aunque hay mucha literatura al respecto, modernamente, desde la Sociedad Opulenta de John Kenneth Galbraith, de 1958, donde toca temas de increíble actualidad, hasta la Sociedad del cansancio’’ de Byung Chul Han, los cientistas buscan afanosamente respuestas al rol de los individuos en las transformaciones económicas y sociales.

La República Dominicana cada día está más cerca del absurdo de Albert Camus que de la racionalidad de René Descartes, de ahí que, salvo honrosas excepciones, tenemos una clase política, desconocedora del ‘’ Know how’’ de su profesión y unos influencers que intentan desde sus plataformas, dirigir espacios de poder de una manera empírica y en la mayoría de los casos, nociva para nuestros jóvenes.

Vivimos la sociedad del ‘’Like’’ como un nuevo modelo de producción capitalista.

Yo me quedo a la antigua. Con los libros de Marta Harnecker y Victor Serge debajo del sobaco y con ‘’ El hombre unidimensional’’ de Herbert Marcuse para poder asumir siempre una actitud crítica y un discurso que eleve las potencialidades de nuestros jóvenes, teniendo como ejemplo, aquel mayo francés de 1968 que nos hizo soñar en que podíamos coger el cielo por asalto.

Eso es preferible a una impiadosa sociedad del ‘’Like’’