SANTIAGO. Esta ciudad se ha convertido en un solo tapón por los cuatro puntos cardinales como consecuencia directa de la construcción del teleférico y el monorriel a cargo del Sistema Integrado del Transporte, sin que por el momento se contemple una solución al problema.
Ya en esta ciudad no existen las horas pico en las que se producían los congestionamientos en las vías públicas de vehículos livianos y pesados, sino que ocurren en la mañana, tarde y noche.
Debido a la construcción del teleférico y el monorriel, se dispuso el desvío de varias calles y avenidas, pero al parecer en vez de contribuir a solucionar el problema han agravado la situación.
Conductores privados dijeron que en ocasiones pierden desde 45 minutos y hasta una hora para trasladarse de un lugar a otro, con lo cual confrontan dificultades en sus actividades productivas o laborales.
Varios dirigentes choferiles, entre ellos Gervacio de la Rosa, presidente de la Federación Regional del Transporte (FETTRANRENO) y el Consorcio Dominicano del Transporte plantearon que no hubo consenso con los choferes para aplicar los desvíos en las rutas urbanas y suburbanas.
Con la construcción del monorriel son impactadas las avenidas Tamboril, 27 de Febrero y la Circunvalación Sur, vías que son utilizadas por los vehículos del transporte público de las rutas F (Cienfuegos), ZP, A y C, lo que profundiza los entaponamientos diariamente.
Mientras la construcción del teleférico incluye a las avenidas Circunvalación Sur, Salvador Estrella Sadhalá y Yapur Dumit, por donde transitan las rutas del transporte urbano M,K, N, H, HV y la CA, en Santiago.
Las excavaciones que se realizan para la colocación de las columnas y torres que servirán de soporte a la estructura de ambos sistemas viales ocupan parte de esas vías, reduciendo significativamente el flujo de los vehículos por esas zonas.