Miles de jóvenes cineastas de todo el mundo sueñan con recibir tres cosas al ver sus proyectos hechos realidad: el reconocimiento del público, un Oscar y participar en el Festival de Cannes.
Este año el sueño de una actriz dominicana de dirigir un largometraje, y participar en L’ atelier de Cannes se hizo realidad, tras trabajar de manera ardua, convirtiéndose así en el primer proyecto dominicano seleccionado en este prestigioso taller.
El proyecto “Candy Town”, de la dominicana Yannilys Pérez, fue seleccionado para el taller de la Cinéfondation del Festival de Cannes, el cual tiene el objetivo de ayudar a cineastas debutantes o confirmados a encontrar financiación para sus obras mediante encuentros individuales con profesionales del sector, durante el Festival que este año se celebra del 17 al 28 de mayo.
“Estoy feliz porque formar parte de L’atelier de la Cinéfondation del Festival de Cannes es ser parte del Festival y del círculo de Cannes. Además es el lugar por donde han pasado cineastas de nombre a los cuales admiro. L’ Atelier de Cannes sigue la evolución de los proyectos que pasan por ahí y además te expone a todos los profesionales de la industria.
Hay películas que han pasado por ahí que son luego seleccionadas ganadoras en el mismo festival de Cannes y sobre todo películas que admiro muchísimo”, expresó la joven con orgullo en conversación telefónica con Qué Pasa!.
Candy Town es el nombre del proyecto de 90 minutos con el que participará Pérez. Este es un drama social donde el humor sobresalta de la ingenuidad de los personajes principales y las situaciones en las que se encuentran. Cuatro jóvenes que buscan libertad e identidad, guiadas por el deseo de ser felices y salir de una vida que no les ofrece futuro.
Durante la entrevista, Pérez, quien se encuentra en el Festival de Cartagena, presentando su película “Jeffrey”, reveló que a finales de octubre envió la solicitud y pasaron varios meses sin noticias. “Pensé que ya no estaba pre seleccionada.
En diciembre, ya casi para Año Nuevo me llega un email donde me piden una entrevista vía Skype. Te puedes imaginar la emoción y los nervios. Respondí y me hicieron una entrevista en enero. Pasaron varias semanas y a final de enero me dieron la gran noticia de que estaba seleccionada con mi proyecto”, explicó.
“El trabajo duro paga. Trabajar y dar lo mejor es la clave. Hay que hacer lo mejor que uno pueda. Eso fue lo que hice y lo que sigo haciendo, dando lo mejor de mí y haciendo hasta dónde puedo. Creo que Dios provee y cuando se busca y se trabaja con una meta, el más allá nos da la recompensa”, afirmó.