El trabajo más productivo es el que sale de las manos de un hombre contento.”
Victor Pauchet
“Nunca te das cuenta de lo que has hecho; sólo puedes ver lo que queda por hacer.”
Marie Curie
Vitelio Mejía fue un guerrero.
Vitelio siempre creyó en que era posible realizar el torneo de béisbol profesional. Cuando muchas personas consideraban que era imposible celebrar la justa con la pandemia de la covid en un punto alto, Vitelio levantó la bandera del optimismo.
Hay que decirlo, muchos pensaron que era una locura de Vitelio, insistir en el montaje de un evento, cuando incluso, algunos de los equipos estaban reculando y cabizbajos. Esa es la realidad.
Vitelio convenció al presidente Luis Abinader de que con grandes esfuerzos se podía llevar alegría a los dominicanos. Finalmente, triunfó la valentía y la confianza del presidente Abinader, quien entendió que el torneo iba a servir de bálsamo para aliviar las penas de los dominicanos.
Vitelio motivó a los directivos y delegados de los equipos: Licey, Águilas, Escogido, Estrellas, Gigantes y Toros para que pusieran un extra en la organización de sus equipos. Así se hizo y todos han dado un gran ejemplo de que: La unión hace la fuerza.
Vitelio fue clave en las negociaciones con Samuel Pereyra, administrador del Banco de Reservas, ejecutivos de esa entidad y los representantes de los seis equipos que intervinieron en el torneo.
Se llegó al acuerdo de un préstamo por 8 años en el que incluye publicidad del Banreservas y otros aspectos que fueron suscritos por ambas partes. Hay que resaltar que el presidente Abinader jugó un papel preponderante, pues desde antes de que se realizarán las elecciones, prometió que apoyaría el campeonato que es uno de los principales pasatiempos de los dominicanos.
Vitelio dialogó y le pidió a Plutarco Arias, ministro de Salud, que contribuyera con su equipo de trabajo, que estaba encabezado por el doctor Edward Guzmán, para que se hiciera un protocolo para evitar los contagios del coronavirus de los jugadores, técnicos, mánagers y todo el personal llamado a laborar en el evento.
Vitelio pudo sortear las difíciles situaciones que se presentaron cuando varios jugadores y dirigentes dieron positivo a la covid-19.
Vitelio habló con los árbitros y les solicitó su colaboración.
Vitelio se mantuvo siempre activo y en contacto con los miembros del Consejo Directivo de Lidom y de sus asesores para tomar las medidas más apropiadas cuando en algunas ocasiones el torneo se “tambaleaba”.
Vitelio nunca temió enfrentar los problemas.
Vitelio contó igualmente con el respaldo de empresas privadas y funcionarios que nunca hicieron actos públicos, pero colaboraron fuertemente en bajo perfil. Vitelio Mejía supo poner todas las piezas en su lugar y lo hizo en momentos de presión.
Vitelio también merece un trofeo de campeón.
Hasta mañana, si Dios quiere, dominicanos.
