Por: TIM REYNOLDS

AP.- La racha comenzó hace poco más de nueve años. Un trío de niños, Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green, llegaron a Denver en una fresca noche de abril de 2013 y ayudaron a Golden State a ganar el Juego 2 de una serie de primera ronda de la Conferencia Oeste.

Y después, Curry dijo algo profético.

“Somos un equipo resistente”, proclamó Curry esa noche.

No tenía idea de cuánta razón tenía.

Los Warriors han estado en 27 series de playoffs durante esas nueve temporadas. Han ganado un partido fuera de casa en cada uno de ellos, una racha incomparable en la historia de la NBA. Y se puede argumentar que ninguna de esas victorias fuera de casa para Golden State en la era Curry-Thompson-Green fue más grande que la última, una victoria por 107-97 sobre Boston en el Juego 4 de las Finales de la NBA el viernes por la noche.

Serie empatada, 2-2. Ventaja de cancha recuperada. El quinto juego es el lunes en San Francisco, el comienzo de un mejor de tres para decidir el título de la NBA. Y si los Warriors no extendieran esa racha fuera de casa, la historia sería muy diferente en este momento. Los Celtics estarían al borde de un título. Los Warriors estarían al borde.

“Qué victoria tan acertada”, dijo Thompson.

De hecho, lo fue, probablemente más que cualquier otra victoria fuera de casa en esta racha de los Warriors.

Ha habido momentos más grandes: los Warriors tienen tres campeonatos en esta era, y sí, recibir un trofeo de oro del comisionado de la NBA, Adam Silver, es el momento más grande que puede tener un equipo. Pero de las 39 victorias fuera de casa que los Warriors han disfrutado durante esta racha, solo una podría realmente estar a la altura de la que obtuvo Golden State el viernes en términos de importancia.

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Ese sería el Juego 4 de las Finales de la NBA de 2015. Mismo escenario: los Warriors estaban perdiendo esa serie 2-1, estaban en la carretera y enfrentaban el temido déficit de 3-1, pero encontraron la manera esa noche en Cleveland de superar a los Cavaliers e incluso la serie en su camino a un seis. triunfo del juego por un título.