Las invasiones de algas, conocidas como sargazo, no es algo nuevo en República Dominicana y el Caribe, vienen desde el 2010 cuando se registraron las primeras oleadas. A partir del 2015 las invasiones arropan abrumadoramente el principal activo de la República Dominicana para el turismo, sus playas.
La Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes de República Dominicana (ASONAHORES), dispuso en noviembre del 2021, como estuvo prometiendo por varios meses, licitar buscando ofertas de sistemas de barreras y recolección en mar del sargazo que cubran 45 kilométros de costa en Verón – Punta Cana. Si el sargazo entra a la costa, la batalla está perdida.
La recolección en mar es vital para garantizar que el sargazo no invada las playas dominicanas, además, si se hace de esta forma, permite el uso del alga como materia prima, ya se ha visto el desarrollo de productos en base y en algunos programas pilotos llevados a cabo por la Fundación Grupo Punta Cana, Grogenics, y otras instituciones.
El pasado 29 de Marzo, ASONAHORES extendió por tercera vez el proceso de evaluación de ofertas.
El período de entrega de propuestas cerró el pasado 31 de Enero y la fecha para dar a conocer los resultados por parte de ASONAHORES fue el pasado 17 de Febrero. Lo que dice que esta entidad ha tenido más tiempo evaluando las propuestas que el tiempo otorgado a los participantes para evaluar y proponer un producto y servicio. Estos retrasos han estado provocando quejas de diferentes sectores concernidos.
Este año el problema del sargazo está afectando enormemente las costas del Caribe, principalmente de México y por montones nuestras playas. Hay quienes se preguntan: ¿Cuánto tiempo más debe pasar para que ASONAHORES ponga en marcha sistemas que garanticen que nuestras playas estén en las condiciones adecuadas para recibir turistas? El pueblo dominicano, los inversionistas, y los turistas están pendientes.
Hace varios meses publiqué en este periódico, El Nacional, un reportaje sobre este tema donde iniciaba diciendo: “La República Dominicana tiene a mano soluciones para reducir el impacto negativo del sargazo en el sector turismo, lo que daría ventaja a nuestro país frente a otros del Caribe con los que compite por esta actividad del ocio, la recreación, la aventura y el divertimento”.
Por: José Vicente Calderón