Complacer cuesta
Cada noviembre repetimos la consigna: “No más violencia contra la mujer”.Endurecemos penas y levantamos casas de acogida. Son medidas necesarias, pero insuficientes: el candado que ponemos después del robo, la justicia que llega tras el feminicidio. Y lo más cruel: muchas veces, ni siquiera esa justicia se cumple, porque el asesino se suicida. Mientras tanto, […]
