Con el nuevo incremento de 25 puntos básicos en su tasa de interés de política monetaria, que aumenta de 8.25 % a 8.50 % anual, el Banco Central prosigue su ofensiva destinada a cumplir con el rango meta de inflación de 4 %+-1, estimada a lograrse durante el primer trimestre de 2023.

El banco emisor asume frente a los elevados riesgos de presión inflacionaria, similar comportamiento de sus pares en el mundo, especialmente la reserva Federal de Estados Unidos y el Banco Central Europeo, que también incrementan sus tasas de interés de referencia.

Es oportuno señalar que en la Zona Euro, la inflación se incrementó hasta 10.7 % y en Estados Unidos, 8.2 %, mientras en República Dominicana es de 8.50 %.

La guerra de Rusia y Ucrania, la disrupción del comercio y transporte mundial y la carestía de materias primas básicas inciden sobre manera en el aumento de la inflación, con la diferencia de que otras economías sufren de recesión o están al borde de la hiperinflación, en tanto que aquí la presión es que el PIB real se incremente entre un 5.0 % y un 5.5%.

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Dado que el Banco Central está en lo suyo, corresponde ahora al Gobierno insistir en políticas fiscales y de inversión para atacar a la inflación por el otro franco.