SANTIAGO.- La Arquidiócesis local de la Iglesia católica entiende que actualmente hay sectores públicos y privados del país que con sus actuaciones están traicionando los principios que cimentaron el edificio de la Patria cuando se fundó el 27 de febrero de 1844.
Indica asimismo, que si seguimos apartándonos de esos fundamentos trinitarios estaríamos transitando por caminos equivocados que nos llevarían hacia la ruina social como sociedad.
Esos criterios de la Iglesia Católica dominicana están contenidos en la nota editorial del semanario nacional Camino titulado “Independencia y Cuaresma”, y que circulará en todo el país a partir del próximo domingo 25 de los corrientes.
“Somos un pueblo que nació en la cuna del Evangelio, ya que así lo quisieron los forjadores de nuestra nacionalidad, porque desde su origen el norte fue : Dios , Patria y Libertad y quienes lo dieron todo por una sociedad basada en la igualdad y la justicia”, refiere la publicación religiosa.
Precisa que a 180 años después de aquella gesta gloriosa del 27 de febrero del 1844, debemos continuar siendo fieles a ese ideal.
“Si nos apartamos de estos fundamentos trinitarios estaríamos transitando por caminos equivocados que nos llevarían hacia la ruina social”, subraya Camino.
Sostiene que actualmente hay muchas acciones a nivel público y privado que traicionan los principios que cimentaron el edificio de la Patria.
De ahí nuestro llamado para que aprovechemos el tiempo de Cuaresma para rectificar, y como nos pide el Papa Francisco, deseamos que esta época sea de conversión, y solo así la humanidad extraviada sentirá un estremecimiento de creatividad: el destello de una nueva esperanza”, puntualiza el semanario nacional Camino.
Pide a los dominicanos que para conmemorar el nuevo aniversario de la independencia nacional hagamos el compromiso de ser mejores ciudadanos.
“Que no sigamos con la actitud dañina de pensar qué puede hacer la Patria por mí, sino qué puedo hacer yo por ella y esa será la mejor y más sincera ofrenda floral hacia los que soñaron con tener una República Dominicana libre y soberana”, concluye el referido comentario editorial.
