El coordinador de la Pastoral Juvenil consideró hoy que el asesinato de una niña de cinco años en el sector Villa Faro, a manos de tres menores, evidencia los problemas de la sociedad y la familia dominicana. El padre Luis Rosario censuró lo que calificó como «bombardeo de mensajes que promueven la sexualidad», así como la paternidad irresponsable.

«Ese hecho muestra la falta de paternidad responsable que hay en la sociedad y el irrespeto a la vida, pero, además, es el resultado de la falta de atención a la familia», dijo el religioso en entrevista a El Nacional.

Rosario lamentó que en el país no exista una política destinada a favorecer a la familia, con programas que sirvan para evitar la ocurrencia de hechos similares.

La muerte de la menor Loreimy de los Santos ocurrió el domingo en el sector Villa Faro, en Santo Domingo Este, donde residía junto a su madre, de 21 años de edad.

Contra dos de los menores, de 13 y 16 años, respectivamente, fue dictada ayer una medida cautelar de un mes de prisión, hasta que la Fiscalía de la provincia Santo Domingo concluya la investigación.

Otro de los implicados, de nueve años, fue enviado al Consejo Nacional para la Niñez (CONANI), bajo atención de las autoridades de la institución.

El informe de la Policía señala que los menores estaban jugando con la niña, a quien violaron, ataron de pies y manos y le amarraron en el cuello un alambre eléctrico, hasta causarle la muerte.

Ese hecho ha causado consternación, no solo en esa demarcación, sino en toda la sociedad, que exige endurecer las penas contra los menores que cometen ese tipo de delito.

Ayer el 96% de los lectores de la edición digital de El Nacional respaldaron a través de un sondeo el uso de la castración química en este tipo de delito.

Otras niñas violadas

El 26 de marzo de este año fue apresado Misael Abraham Castro, de 19 años, residente en Los Guayacanes, y quien fue acusado de haber violado y asesinado el día anterior a una niña de nueve años en Boca Chica.

El cuerpo de la niña fue encontrado flotando en el Mar Caribe con signos de violación, golpeada y asfixiada.
En octubre del 2012, dos niñas de nueve y diez años fueron violadas y asesinadas por sus verdugos.
El primero de los casos ocurrió en Baní.

El cuerpo de una menor de 10 años fue encontrado con signos de violación en la comunidad Los Ríos de Neyba, cuyo caso viene a ser el segundo en esta semana. El primero ocurrió en el municipio de Baní, provincia Peravia.

El cuerpo de la niña Llenita Ednita, de 10 años y de nacionalidad haitiana, fue encontrado en unos matorrales envuelto en una sábana. La menor estaba reportada desaparecida y era hija de a señora Mana Ednita, de 40 años, residente en la calle Juan Pablo Duarte, del municipio Los Ríos.

Con relación al caso fueron detenidos para fines de investigación tres personas, incluyendo el haitiano Ramón Anisa, de 33 años, quien de acuerdo a su madre había amenazado con darle muerte a su hija.

Una semana antes, la prensa se había hecho eco de la desaparición en Baní de la niña de cinco años, Keisy Mejía Reynoso, hija de Ramona Benz Reynoso, de 33 años.

Posteriormente su cuerpo fue hallado con signos de violación y de violencia física en el patio de una casa en construcción, en la Calle Máximo Gómez, del Cruce de Arroyo Hondo, en Baní.