Luego de comprobar muchas ingratitudes y actitudes negativas, asumidas por algunos amigos y dependientes del saliente ministro de Deportes, Francisco Camacho, he hecho algunas reflexiones que podrían ayudar al nuevo ministro de Deportes, Kelvin Cruz.

Ningún cargo público da conocimiento per se, mientras más importante sea la posición, se requiere de mejores asesores. Estoy convencido, además, que el peor enemigo de cualquier funcionario de importancia, es dar informaciones de Estado a un subalterno o amigos, sin saber sus verdaderas intenciones. Hace tiempo que el Movimiento deportivo está envuelto en una maraña de chisme y una total ausencia del pensamiento crítico.

Tanto Kelvin como Camacho, tienen muchos peldaños que recorrer, deben saber que un solo error, se traga todas las virtudes y acciones positivas realizadas. Cuando se es joven y se maneja poder, hay que acudir a las enseñanzas de Ulises, que, para evitar el influjo de las sirenas, tapó sus oídos con cera. La psicología social enseña, que los hombres que manejan poder, gustan de oír cosas agradables y huyen a las verdades incontrastables.

Hoy, Francisco Camacho está consciente de que jamás volverá a ser ministro de Deportes, o digamos, que son mínimas las posibilidades. De seguro que reflexiona sobre algunas cosas que debió haber hecho y otras que nunca las debió hacer. En ese espejo debe verse Kelvin Cruz: tiene una sola oportunidad para hacerlo bien.

Tuve el privilegio de participar en la entrega de mando que hizo Camacho a Kelvin Cruz, y recuerdo vívidamente, que, bajo aplauso y lágrimas de muchos empleados del Ministerio, Camacho gritó a todo pulmón: ‘’ Cuidenme a Kelvin, ese es un compañero bueno del partido’’.

Kelvin todavía no sabe a ciencia cierta, que este movimiento deportivo, en muchas ocasiones hace el papel del dios Romano Saturno que termina devorando a sus propios hijos con infamias y calumnias.
Un solo ejemplo basta para que el nuevo ministro haga conciencia de cuán movediza es la tierra que pisa.

La gestión de Francisco Camacho, invirtió del 16 de agosto de 2020 al 16 de agosto de 2024, el 49 por ciento del presupuesto del Ministerio de Deportes en alto rendimiento, más de 6 mil 400 millones. Las Federaciones recibieron a tiempo todos sus recursos. Sin embargo, hoy en día, algunos federados que se sirvieron con la cuchara grande, son sus más fervientes detractores.

Un encuentro entre ambos miembros del Partido Revolucionario Moderno, podría dar buenos frutos.
Mi consejo es simple: las torpezas y las acciones inadecuadas de los subalternos, siempre empañan el prestigio de los líderes. Hay que saber elegir los consejeros.

Por: Ramón Rodríguez
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