Santo Domingo.- La complicidad estatal con grupos de pandilleros que operan en barrios de la capital y la provincia Santo Domingo, es uno de los principales problemas que afectan a residentes en dichas demarcaciones, según denunciaron familias que habitan en esos lugares.

Según miembros de una familia de Barrio Nuevo, en Sabana Perdida, en la provincia Santo Domingo, los agentes de la Policía no van al lugar, y cuando lo hacen, es “para cobrar peaje”.

Dicen que uno de los pronblemas que les afecta es la música a alto volumen, que coloca un oficial de la Policía, a quien, según afirman, han llamado a la atención, pero éste no hace caso.

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“Hemos hablado con él, pero no hace caso y cuando llamamos a la Policía de aquí, en Santo Domingo Norte, viene una patrulla, lo saluda y se marcha, nunca le piden que baje la música”, dicen los denunciantes.

Mientras, residentes en el barrio Puerto Rico, en Los Mina, se quejaron por la gran cantidad de hechos delictivos que se cometen en el lugar, a cualquier hora del día.

Aseguraron que en los barrios de la zona operan varias pandillas que tienen en zozobra a los residentes de esa localidad, por lo quie pidieron la intervención de las autoridades.

Se quejaron por la alegada apatía estatal para frenar la ola delictiva que les afecta.

“Desde que las actuales autoridades asumieron el poder, están prometiendo una reforma policial que solo ha ocurrido en la prensa, porque cada día hay más delin cuencia a nivel nacional”, dijo José Mejía, residente en la localidad.

La misma queja expresaron habitantes de los sectores Villas Agrícolas, Simón Bolívar, 24 de Abril, Los Guandules, Cristo Rey, Capotillo, y Villa Francisca, en el Distrito Nacional.