POR RAFAEL SANTOS
Adotrinado como otros tantos dentro del Movimiento 14 de Junio (1J4), Francisco Antonio de la Rosa, mejor conocido como Caca, asegura que el Movimiento San Francisco, fue más que todo una demostración de honor a los invasores que aseguraban que en el país no había guerra.
Junto a sus amigos combatió en el Comando San Francisco, el cual operaba en la Zona Colonial de Santo Domingo, específicamente en la calle Mercedes, próximo a la Palo Hincado.
De la Rosa asegura que su decisión de insertarse dentro de las diferentes actividades bélicas en la guerra de abril del 1965, fue secundada por otros amigos, los cuales al igual que él se identificaron con lo que en la capital se desarrollaba.
Fue así, que un buen día de mayo del 65, deciden tomar rumbo a Santo Domingo, para participar de las acciones a favor del retorno a la constitucionalidad.
Para suerte de los que iban a la lucha, un camionero que tomaba rumbo hacia la Capital los monta en Bonao, donde habían sido dejado abandonados por el conductor que se había comprometido llevarlos a Santo Domingo.
El conductor del camión terminó formando parte en uno de los comandos revolucionarios.
Inmediatamente se incorporan al Comando San Francisco les entregaron una ametralladora Cristóbal, con la cual asegura se sintió incómodo, ya que el manejo de las armas que no era para ese tipo de artefacto.
La primera batalla en la que participa, fue en la cercanía de zona de la Feria, con una patrulla integrada por soldados brasileños, muriendo ocho de los invasores, y algunos constitucionalistas heridos.
Recuerda que en la calle Enriquillo hubo otro combate, pero esta vez con soldados estadounidenses, en donde si hubo bajas significativas en el Comando San Francisco, ya que los invasores tenían mejor conocimiento del área y mejor entrenamiento militar.
Debido a que la prensa trataba de minimizar los eventos bélicos a un grupo de connotadas figuras que estaban la Capital decide ir a San Francisco de Macorís y formar allí un foco guerrillero para llamar la atención de los medios informativos, y extender las acciones a otros puntos de la nación.
Para los americanos justificar la guerra, porque ellos decían que aquí no había nada, hubo que expandirla a otros lugares como fueron Santiago, Ramón Santana y San Francisco de Macorís, afirma.
Es por eso que dirigentes del 1J4 y del Movimiento Popular Dominicano (MPD) deciden formar una alianza que extendería la lucha hasta esta parte del país y por instrucciones de las cúpulas de ambas entidades de izquierda, es que Homero Hernández, Bienvenido Leal Prandy (La Chuta), Valdemiro Castro, Pacito (Comandante) Polanco, Julio Payano, Blanco Peña, Reyes Saldaña, Ismael Duarte, y los hermanos Oscar y Francisco Lantigua deciden ir a San Francisco y crear un movimiento que tendría como objetivo la toma de la fortaleza y el destacamento policial.
La fortaleza estaba ubicada en la calles San Francisco esquina Luperón mientras el destacamento policial estaba en la zona del parque Duarte, donde funciona la Dirección Regional de Pasaporte.
Este movimiento tenía su sede en un local en las inmediaciones del cementerio viejo.
El 24 de junio, en hora de la noche, ya reunidos la mayor parte de los integrantes del Movimiento, y ya casi listo para darle inicio a las actividades de la toma del cuartel y de la fortaleza, me llama Homero y me dice, -faltan dos hombres para completar el comando- entonces ahí mismo decide mandarme a mi y a Oscar Lantigua a buscarlo, cuando llegamos a la casa donde estaban los compañeros que faltaban, dimos dos toques en la puerta, que era la señal, dijo.
Ya en el lugar señalado quien le abre la puerta a Francisco de la Rosa, fue Oscar Cabral, y de inmediato Reyes Saldaña cuando estos llegaron le entrega una de las armas que para la causa constitucionalista de las que fueron traídas desde Santo Domingo.
Al día siguiente, cerca de la 2: 30 de la madrugada estaban en el lugar señalado el comando completo, Francisco recuerda que llega un Jeep lleno de efectivos del Ejército. Todos los miembros del San Francisco estaban armados.
Ellos se pararon en la misma puerta y Reyes Saldaña, que era un hombre guapo, que estaba dispuesto a todo, nos dice el primero que entre por esa puerta, hay que abrirle fuego- pero al parecer ellos a pesar de que sabían que nosotros estábamos ahí, no hicieron nada y se fueron sin decir media palabra, recuerda.
A eso de la 6:00 de la mañana del 25 de junio, Reyes Saldaña llama a los miembros del grupo para informarle del fracaso del Movimiento, pues con extrema precaución, horas antes este hizo un paseo de reconocimiento por la zona céntrica, en donde pudo contactar que el pueblo estaba totalmente militarizado.
Al anuncio de Reyes, los complotados deciden salir del escondite y refugiarse en otros lugares, razón por la cual los 9 hombres que integraban el Comando, salen con extrema discreción del sitio hacia las diferentes zonas, es ahí cuando a Reyes Saldaña se le cae el peine de su ametralladora y son visualizados por un helicóptero del ejército que patrullaba la zona.
A pesar de que son vistos, los integrantes de la patrulla aérea no hacen nada, pero Domingo El Chueco Berroa, hace varios disparos que no logran impactar el helicóptero, razón por la cual Reyes se incómoda y en el instante se da una discusión entre esos dos hombres.
Luego de algunos minutos de andar por caminos cienagosos, tanto Francisco como Oscar y Juanito Lantigua se marchan juntos a sus respectivos hogares cuando son sorprendidos por una patrulla del ejercito.
No pasó mucho tiempo sin que descubrieran donde estábamos por lo que nos llevaron preso hasta la fortaleza, hasta esa carnicería, amarrados, y un periodista que estaba en el lugar hace un comentario en contra de nosotros, que yo le contesto de inmediato, razón por la cual me dieron la primera galleta que me dejó aturdido y me partió esa oreja y a mi compadre Oscar le dieron también,
(El autor es periodista, corresponsal de este diario en Salcedo).