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¿El secreto de Severino para evitar el dolor? Menos es más

¿El secreto de Severino para evitar el dolor? Menos es más

Luis Severino

Traducción por ROOSEVELT COMARAZAMY comarazamy_medina@hotmail.com |

TAMPA, Florida — Después de pasar la mayor parte de los tres años sin poder pararse en un montículo con la frecuencia que quisiera, Luis Severino llegó al campamento con la intención de lanzar con fuerza. Anunciaría su presencia encendiendo pistolas de radar y lecturas de Statcast, preferiblemente alcanzando los tres dígitos. 

Eso resultó en un dolor en el brazo derecho que encendió las alarmas en todo el universo de los Yankees, y Severino ahora suscribe la idea de que menos puede ser más. Severino mostró esa eficiencia recién descubierta el sábado, disparando cuatro entradas en blanco en una victoria de la Liga de la Toronja 10-0 acortada por la lluvia sobre los Bravos. 

“Cada vez que me dan la bola, eso es lo que trato de hacer: lanzar fuerte”, dijo Severino. “Me di cuenta en los últimos días que no necesito lanzar 100, 99, 98. Si puedo controlar la zona y llegar a 94, 95, 96 durante cinco o seis entradas, sería más seguro para mí. Cuidando mi brazo”. 

Severino dijo que estaba derribando en su salida de primavera anterior (25 de marzo), cuando caminó a cuatro Filis en 1.2 entradas y luchó con su mecánica desde la posición de lado. Buscó tratamiento para un brazo que molestaba al día siguiente, y el club relajó su acumulación por precaución. 

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“Hace tanto tiempo que no lanzo que cada vez que siento algo, me preocupo porque no sé qué será lo próximo”, dijo Severino. “He tenido tantas lesiones: hombro, codo, ingle. Cada vez que siento algo, acudo de inmediato a los entrenadores para tratar de solucionarlo rápido”. 

Ese descanso le dio mayor importancia a la actuación del sábado. Aunque los Yankees deben esperar para ver cómo responde Severino el domingo por la mañana, según todos los primeros indicios, pasó esta prueba con gran éxito. 

“Lanzó muy bien la pelota”, dijo el manager Aaron Boone. “Pienso que realmente se centró en su entrega y en ser consistente con eso. Todo salió bien y ejecutado. No cometió muchos errores. Fue una salida muy alentadora para él. Con suerte, hacia adelante y hacia arriba”. 

Severino permitted just one hit — an Adam Duvall double that opened the second inning — and struck out three without issuing a walk in his 57-pitch effort (42 for strikes). Feeding Atlanta a heavy diet of fastballs (28) and sliders (23), the right-hander averaged 96.2 mph with his heater, touching 98.2 mph. 

Severino permitió solo un hit, un doble de Adam Duvall que abrió la segunda entrada, y ponchó a tres sin otorgar una base por bolas en su esfuerzo de 57 lanzamientos (42 por strikes). Alimentando a Atlanta con una dieta pesada de rectas (28) y deslizadores (23), el derecho promedió 96.2 mph con su calentador, tocando las 98.2 mph. 

“Nos enfocamos en mantener su lanzamiento un poco más unido, permaneciendo detrás de los lanzamientos y controlando sus líneas al plato”, dijo el entrenador de lanzadores Matt Blake. “Todavía vimos una buena velocidad, y controló su ritmo a través del plato mucho mejor. No hubo tanto esfuerzo para girar los lanzamientos y luchar contra su entrega cuando los muchachos se subían”. 

Aunque la salida no fue suficiente para borrar una efectividad de primavera antiestética de 8.22 (siete carreras limpias en 7.2 entradas), Severino saltó a la temporada regular con una nota positiva muy necesaria. 

Luis Severino

“Lo que habíamos estado viendo ahora está comenzando a traducirse en los juegos”, dijo Blake. “Todo su trabajo paralelo, lo está construyendo sobre eso. Es un lanzador consumado, por lo que no te preocupa, ‘¿Podrá hacerlo?’ Sabemos cómo se ve Severino. Es solo cuestión de que él siga siendo dueño de eso y lo repita”. 

La próxima asignación de Severino será enfrentar a los Medias Rojas en el segundo juego de la temporada regular el viernes en el Yankee Stadium. 

“Para mí, pasar por todo lo que pasé, es más un juego mental en este momento”, dijo Severino. “Me siento cómodo. Sé que mi cuerpo está bien ahora. Sé que puedo controlar mi bola rápida, hacer todos mis lanzamientos y al día siguiente despertarme y estar bien. Eso es lo principal para mí”. 

El Nacional

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