La denuncia del senador Dionis Sánchez de que la construcción del puerto de Cabo Rojo, Pedernales, no se ha iniciado por falta de estudios ambientales es digna de que se le preste atención.

Más ahora cuando se anuncian hoteles y otros proyectos para el desarrollo turístico de la provincia. El legislador no es el primero en poner sobre el tapete la aparente lentitud para otorgar permisos ambientales para obras.

Respecto al sector minería se ha expresado la misma queja, lo que se entiende debe motivar la intervención del ministro Miguel Ceara Hatton para evitar que por burocracia o temor al ruido de ecologistas se frustren proyectos importantes para el desarrollo del país.

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Para que no se malinterprete, lo que se reclama no es festinar los estudios, sino simplemente acelerarlos, siempre con apego a los criterios técnicos más rigurosos.

Más cuando se supone que se cuentan con los recursos técnicos para evitar que la demora se convierta en una traba para la generación de empleos y recursos para afrontar las muchas necesidades del país. La denuncia del senador de Pedernales sobre el muelle de Cabo Rojo es otra clarinada.