El incesante acoso a que fue sometido por el Gobierno de Nicolás Maduro no dejó más opción al candidato opositor Edmundo González Urrutia que emprender el camino del exilio para evitar terminar en prisión.
Tras una orden de captura acusado de terrorismo, González Urrutia consiguió asilarse en la embajada de España y viajar a ese país. Consciente de las intenciones del Gobierno de ponerlo tras las rejas el candidato presidencial opositor desacató las primeras dos citaciones de la fiscalía para interrogarlo sobre la difusión de las actas que lo dan ganador de las elecciones del 28 de julio.
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Con la intensa búsqueda que se desplegó tras una orden de captura, González Urrutia, quien se mantenía oculto, consiguió llegar a la embajada de Venezuela y pedir asilo político. España, que lo ha calificado de héroe, no tardó en concederle la petición para salir de Venezuela.