Carta de los Lectores Opinión

Haití-Cuba, RD-Venezuela

Haití-Cuba, RD-Venezuela

Hasta el alumbramiento de este libro del Archivo General de la Nación, era desconocido en Cuba, República Dominicana y Haití que con las guerrillas de Constanza, Maimón y Estero Hondo llegó una cuarta expedición.

Campesinos haitianos mataron a los expedicionarios a machetazos, palos o el ejército los torturaba y los fusilaba. Este hecho provocó una batalla épica –amenaza de guerra– entre el líder revolucionario Fidel Castro, los dictadores Jean-Claude Duvalier de Haití y el dominicano Rafael Leónidas Trujillo Molina.

El detalle sobre este acontecimiento lo narra la cubana María Antonia Bofill en el libro “La olvidada expedición a Santo Domingo en 1959”. Ella es hija de uno de los expedicionarios muertos, José Antonio Bofill, de un grupo de 30, que el 10 de agosto de 1959 salieron del municipio Puerto Padre, del oriente de Cuba.

Fueron combatientes de la Revolución cubana, que en su mayoría lucharon bajo las órdenes del comandante Delio Gómez Ochoa, que ya se encontraba en Santo Domingo.El objetivo del grupo fue reforzar a las expediciones del 14, 19-20 de junio de Constanza, Maimón y Estero Hondo. Eran de Cuba, Argelia, Estados Unidos, Argentina.

Fue un fracaso: se perdieron en la ruta Cuba-Santo Domingo; al llegar a las costas haitianas fueron descubiertos y perseguidos por las autoridades de esa nación. Asediados, desembarcaron por la zona de Cabo Haitiano, tomaron un área montañosa. Después de varios combates y mil penurias apenas sobrevivieron cinco.

Aunque el objetivo fue luchar contra la dictadura dominicana, Duvalier se dejó manipular de Trujillo y acusó a Cuba ante la Organización de Estados Americanos (OEA) de invasión a su territorio para derrocar el gobierno. Cuba reaccionó rompiendo relaciones diplomáticas con Haití.Peor aún, para quitarse de encima la presión internacional (de Estados Unidos y la cortante-hábil diplomacia trujillista), Cuba se desligó de los internacionalistas que salieron a derrocar la dictadura dominicana: Fidel los acusó de ser “unos aventureros”.

El embajador cubano en Haití declaró a la prensa que “los invasores cubanos eran mercenarios pagados por el enemigo para desacreditar y crear dificultades al gobierno de Castro”.En el juego de las amenazas de guerra entró el gobierno venezolano de Rómulo Betancourt, que acogía a exiliados dominicanos y denunciaba las atrocidades trujillistas. “Prepara Trujillo la invasión a Cuba y Venezuela”, dice un titular de la revista Bohemia.

Mientras estos gobiernos forcejeaban, los cinco expedicionarios cubanos, sufrían en las cárceles haitianas, donde permanecieron 14 meses, cuando el gobierno mejicano gestionó su libertad. Al regresar a Cuba jamás se reunieron ni hablaron del hecho hasta que la escritora recogió sus testimonios y el de Gómez Ochoa en este libro.
Por: Roberto Valenzuela

El Nacional

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