Si en el hospital de la Policía existía alguna irregularidad, fue corregida a la velocidad de un relámpago porque ha podido comprobarse que el centro opera de manera adecuada.

Los modernos equipos, higiene y eficiencia administrativa tornan insignificante cualquier inconveniente en un hospital docente que brinda todas las especialidades.

Tan bien equipado está el hospital que es de los pocos en el país que tiene el aparato más moderno para el tratamiento de cateterismo.

Ante los problemas que en el pasado se presentaron con el suministro de agua, que es con lo que opera el sistema de aire acondicionado y es esencial en otros servicios, la administración se ha ocupado de disponer de una reserva permanente del líquido para evitar inconvenientes.

Trascendieron quejas de que en el centro había deficiencia con el servicio, pero si en verdad los inconvenientes existían, al menos últimamente, se esfumaron o desaparecieron.

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Por la organización y el tratamiento a los pacientes se trata, de acuerdo con lo que ha podido observarse, de un hospital bien gerenciado tanto en el área de la salud como administrativa.

Por la rapidez y eficiencia en las atenciones los más de 30 mil miembros de la Policía tienen motivos para estar orgullosos de su hospital.

Sus directores y el propio director de la Policía se han ocupado de que el centro opere no solo sin inconvenientes, sino con los más elevados índices de eficiencia.