NUEVA YORK (Del NY Daily News) – Kevin Durant es un dios del baloncesto, según la encuesta de GM de la NBA

Kevin Durant debe ser un dios del baloncesto vivo y que respira. Un elogio tan grande podría ser la única explicación posible de los resultados de una encuesta anónima de los 30 gerentes generales de la NBA para cada uno de sus equipos.

Claro, al 72% de esos gerentes generales le gustaron las probabilidades de que los Nets ganen las Finales de la NBA de 2022. Sin embargo, el 37% cree que Durant ganará el premio al Jugador Más Valioso del Año de la NBA en 2022, el 67% cree que es el mejor alero pequeño de la liga (muy por delante de LeBron James, 17% y Kawhi Leonard, 7%), y 41 % quiere que Durant tome el tiro final con un juego en la línea.

A modo de comparación, el 24% de los gerentes generales votó a Stephen Curry por el tiro final de un juego, el 17% votó a Damian Lillard, el 7% cada uno a Luka Doncic y Nikola Jokic, y el 3% al compañero de equipo de Durant, Kyrie Irving.

Esos GM tienen razón. Durant viene posiblemente de la temporada más impresionante de una carrera en el Salón de la Fama en la primera votación.

La salida de su equipo en los playoffs de la segunda ronda no fue culpa suya, como lo demostró al llevar al equipo de Estados Unidos al oro en los Juegos Olímpicos de Tokio. Lo hizo de manera dominante, forzando las manos de ESPN y Sports Illustrated, quienes nombraron a la superestrella de los Nets como el mejor jugador de baloncesto.

También lo han hecho los gerentes generales de la liga, que desearían haber tenido la oportunidad de firmar a Durant hace dos veranos, incluso si eso significaba contratar a Kyrie Irving y, sí, incluso si significaba contratar a DeAndre Jordan. Esos mismos gerentes generales también votaron a los Nets de Durant como el equipo más divertido de ver de la NBA y clasificaron a Durant como el tercer jugador más versátil de la liga detrás de LeBron y Giannis Antetokounmpo.

Es casi como si recordaran quién era en primer lugar.

El sesgo de lo reciente ha demostrado ser algo real, y cuando Durant se vio obligado a permanecer sentado una temporada completa debido a la ruptura de Aquiles, el mundo entero, tanto los fanáticos como los gerentes generales de la liga, cuestionaron si volvería a estar en forma. En su ausencia, Leonard, James y Antetokounmpo se turnaron para luchar por el estatus de mejor jugador de la liga.

Sin embargo, en su primer año de regreso de la lesión que ha descarrilado muchas carreras históricas en la NBA, Durant registró promedios de 27 puntos, siete rebotes y 5.6 asistencias por juego. Disparó un récord personal tanto desde el campo (53,7%) como desde tres (43,7%) y cayó solo un 1,2% de tiros libres antes de unirse a Irving en el 50-40-90 Club la temporada pasada.

Eso, por supuesto, habría sido la segunda incorporación de Durant al club, al unirse por primera vez en 2013 con el Oklahoma City Thunder. Su dominio como mejor jugador de la liga no ha sido nada nuevo.

Esos gerentes generales también votaron a James Harden como el mejor escolta de la NBA, lo que puede ser una sorpresa para la mayoría de los que saben que Harden ha sido el armador de tiempo completo de Brooklyn desde un mes después de su cambio a Brooklyn. El entrenador en jefe de los Nets, Steve Nash, también ocupó el cuarto lugar en la votación de GM sobre cuál entrenador ejecuta la mejor ofensiva.

Esa ofensiva pasa por Durant, quien finalmente ha recibido sus flores como el mejor jugador de baloncesto. Y si sus Nets pueden ganar un anillo esta temporada, y tal vez más en temporadas futuras, tal vez la conversación sobre el dominio de Durant comience a extenderse más allá del alcance de un solo año.