La designación de Iván Ruiz como director de la Corporación Estatal de Radio y Televisión ha sido un gran acierto del actual gobierno. En la actualidad, con la llegada de Iván Ruiz , se ha verificado una importante transformación en lo técnico, programático, en lo social y humano, amparado en el concepto de lo que es una televisión pública.

El que visita la planta de RTVD advierte la implementación de un reingeniería que va más allá del remozamiento que en el pasado gobierno se le hizo a la planta física.

Un rediseño y remozamiento de los estudios y salas de transmisión con nuevos equipos, departamentos de creatividad y diseño, que hacen posible que hoy días la planta televisora estatal exhiba la mejor línea gráfica de la televisión dominicana, y una programación donde hay producciones que nada tienen que envidiar a la de canales extranjeros, como por ejemplo el telematutino El Mangú, una verdadera revista de variedades, realizada con talento criollo, con un contenido que enriquece las mañanas dominicanas.

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Y así como este, programas de entretenimiento muy ligeros y amenos, como Luna Llena, el infantil TopiTok; culturales y educativos como Bienvenidos a la Casa, La Cultura Vive; el noticioso Central de Noticias, complementados con TV-Revista y La Cocina de Wandy.

Se incluye series animadas de carácter histórico, como “Los Trinitarios”, así como la titulada “Familia Espejo”. De igual manera hay que resaltar la implementación de una amplia cobertura noticiosa, con reportajes en vivo desde diferentes partes del país.

Todo ello enmarcado en una dinámica que rompe con los patrones y las estructuras establecidas en la radiotelevisora estatal.

Iván se ha preocupado por despojar del olor a rancio que había en la empresa, y que alejaba a la teleaudiencia, como también ha trabajado para atenuar el tufillo gubernamental que desde siempre le ha acompañado.

La está llevando a lo que siempre debió haber sido: La televisión pública…la del pueblo, la de la gente. Ese esfuerzo ha conllevado grandes tareas, así como la procura de asistencia como la obtenida con Televisión Española para la creación de un instituto audiovisual, destinado a crear técnicos para la televisión.

De igual manera el proyecto de apertura de una señal internacional del canal estatal para Estados Unidos y otros países, dirigida a la diáspora dominicana, lo cual es parte de la visión del presidente Luis Abinader.

Justo es que los dominicanos en el extranjero, y la gente de otros países, puedan accesar poder ver la programación y el mensaje del primer canal con el que se inició la historia de la televisión dominicana.

Por Joseph Cáceres