Reportajes

Las empresas constructoras de torres y plazas comerciales

Las empresas constructoras de torres y plazas comerciales

La construcción de grandes torres  de apartamentos y plazas comerciales en las zonas residenciales de  de Santo Domingo se ha convertido en un grave problema para los peatones que se quedaron sin aceras para transitar, porque las empresas constructoras se adueñaron de esos espacios públicos.

Las aceras están ocupadas por montones de varillas, cemento, bloques, madera, arena y otros materiales de construcción, que obligan a los transeúntes a lanzarse al pavimento y exponerse a ser arrollados por un vehículo de motor.

La situación se repite en los ensanche Naco, La Esperilla, Piantini, Gazcue, Los Prados, El Vergel, Paraíso, Serrallés, Arroyo Hondo, San Jerónimo, Miraflores, entre otros sectores, ante la mirada indiferente de las autoridades del Ayuntamiento del Distrito Nacional.

Algunas compañías se apropiaron de las aceras construyendo grandes verjas metálicas, de zinc o de concreto alrededor de sus obras, sin tomar en cuenta que ese es un bien común a todos los ciudadanos.

“Es obligatorio seguir todas las normas de seguridad. Prohibido el paso a toda persona ajena a la obra”, expresa un letrero colocado en la verja levantada por el contratista de una torre de apartamentos del ensanche Naco obstaculiza el tránsito de peatones por el lugar.

Pero además, los ingenieros a cargo de las obras estacionan sus vehículos en las aceras y hasta los grandes camiones en los que transportan los materiales de construcción.

“Ese un cuadro desgarrador, un verdadero desorden, que contribuye a arrabalizar todo el entorno de esas construcciones”, afirma Ricardo Almonte, un vecino de la Esperilla que clama  por una solución al problema.

En la esquina formada por las calles Raúl Cabrera y Alberto Larancuent, en el ensanche Naco, la compañía que levanta una torre de varios pisos invadió la acera abriendo  grandes  hoyos, que permanecen abiertos, sin que ninguna señal advierta a los transeúntes del peligro al que se exponen.

La mayoría de las empresas usan las aceras para levantar grandes tarimas de madera para depositar parte del material que los obreros suben a los pisos más altos.

Andrea Andujar, vecina del sector de Naco, acusó a las autoridades del Ayuntamiento  de actuar en complicidad con los responsables de esas edificaciones.

“Cómo es posible que un inspector del Ayuntamiento no vea eso, que la gente tiene que transitar en medio de los vehículos, en un país donde los conductores no ceden el paso al peatón”, precisa.

“Con el alegato de que esas compañías invierten en el país y contratan unos cuantos trabajadores, les permiten violar constantemente las leyes. Las autoridades no hacen respetar las leyes”, expresa Andújar, quien dijo que ha planteado el problema en múltiples ocasiones en las instancias correspondientes.

Como en los barrios de la parte alta, en los sectores residenciales de la capital, los vecinos son acosados por la ocupación irregular de los espacios públicos.

“Hace falta conciencia ciudadana, en la población y en las autoridades”, asegura Élida Cabrera, en Gazcue.

Un Apunte

Esa  situación es  violatoria de los derechos de los ciudadanos,  pone en peligro su integidad física y  que arrabaliza los sectores residenciales afectados.

Se produce ante la mirada indiferente de las autoridades del Ayuntamiento del Distrito Nacional, que nada hacen para solucionarla.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación