El dirigente reformista José Osvaldo Leger consideró que cuando este domingo se anuncie la posición que adoptará el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) de cara a las próximas elecciones, Carlos Morales Troncoso habrá de concretizar una de las acciones de más trascendencia desde que ocupa la presidencia de la organización. El ex presidente del Senado dijo que la decisión que anunciará Morales Troncoso no será unilateral suya, a pesar de que se le dio mandato legal para tomarla en cualquier sentido, sino que se origina en un consenso en los niveles altos y bajos de la entidad y con ella dará otro de sus múltiples pasos dirigidos a preservar el partido colorado y a garantizarle un exitoso futuro.

Hacia esos fines supremos mantener la fortaleza, el dinamismo y la unidad del partido- ha enfilado el camino que tesoneramente y sin desviaciones, abre desde septiembre del 2009 Morales Troncoso, de quien se puede aguardar, sin temor, atinadas decisiones que lleven al PRSC a acuerdos provechosos en la actual coyuntura política, agregó.

Opinó que el actual Canciller de la república ha invertido en el PRSC energías y tiempo que muy bien hubiera dedicado a otras causas más rentables desde el punto de vista personal y ha conducido sin estridencias ni choques traumáticos a un partido que no es ajeno a la efervescencia en que asiduamente se desenvuelve la vida del pueblo dominicano.

Leger estimó útil poner de relieve que en Morales se registra uno de los pocos casos en toda la larga vida institucional del país de un hombre que no ha ido a la actividad política para lucrarse de ella sino con la intención única de servir a la nación. Y resaltó que a su paso por los organismos oficiales, bajo banderas partidarias diferentes, ha cumplido fielmente con sus obligaciones tanto administrativas como políticas, confirmando que es hombre en quien se puede confiar.

Afirmó que al desempeñar la Presidencia del PRSC, Morales ha propiciado la democratización de la organización, permitiendo el libre juego de las ideas en los organismos de dirección y la adopción de decisiones colegiadas; y ha administrado escrupulosamente los recursos económicos, asignándolos a tareas palpables e incuestionables, entre otras cosas. Además, ha influido desde su actual cargo oficial para favorecer a múltiples cuadros del partido con ubicaciones en el tren estatal y, sobre todo, ha rescatado la buena imagen de la cúpula del partido, dotándola del orden que se vio a veces tambaleante y, sobre todo, de respeto público.