El presidente del PRM, José Ignacio Paliza, tendrá que buscar la manera de aplacar la tormenta que sacude a la organización con respecto al problema del empleo.
Por las supuestas presiones de jóvenes que no han sido colocados el presidente de la Juventud del PRM en el Distrito Nacional, Ricardo Gil, optó por renunciar del partido.
Gil se quejó de que los funcionarios con los que ha podido hablar le han manifestado que por ahora no hay oportunidades de empleos. Otro signo del malestar lo representa la dura crítica del senador Franklin Romero, quien acusó al 80% de los funcionarios de ignorar las instrucciones del presidente Luis Abinader.
La queja de la gente del PRM es a todos los niveles. En su condición de presidente la organización Paliza tendrá que explorar alguna fórmula para evitar que la crisis por los empleos alcance mayor dimensión.