Los dominicanos estamos hechos de merengue, un ritmo contagioso y vibrante que nos lleva de dar vueltas y pasos rápidos, a bailar lento y pegado.
Su sabor musical es el resultado de una perfecta mezcla de ingredientes instrumentales (tambora, güira, acordeón, trompeta, etc) que ha provocado que esta parte esencial de la cultura e identidad dominicana, se extienda por el mundo contagiando de alegría a quienes lo escuchan.
Cada 26 de noviembre se celebra este ritmo autóctono dominicano, declarado en el 2016 Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, y con el cual, en el año 2019, República Dominicana obtuvo un récord Guiness por registrar el mayor número de parejas bailando merengue de forma sincronizada, superando a Rusia, nación que tenía esta marca desde el año 2013.
Aquellos que han dejado huellas en el merengue y que han sido abanderados del referido género celebran, pero ¿En qué posición ha encontrado este día al merengue?
Para el merenguero Pochy Familia, líder de la orquesta Cocoband, el merengue en estos momentos está recibiendo un apoyo muy especial.
“Creo que lo que sucede es que ha habido un cambio en la industria musical en sentido general: la exposición de nuevos ritmos, una nueva generación de la población que está ubicando nuevas expresiones musicales y con la cual se está identificando; nos ha puesto a nosotros los merengueros, a ser más competentes y más competitivos”.
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Destacó que hay una nueva generación también de merengueros que están incursionando con muy buenos aportes, por lo que considera que el merengue de manera evolutiva está haciendo su trabajo.
“En términos de apoyo, entiendo que las estaciones de radio deberían darle un poco más de apoyo al género”, aunque destacó que entiende que hoy se escucha menos radio, por lo que la programación radial es más de programas interactivos, de política, deporte y salud, “lo que ha mermado un poco la difusión de la música en sentido general, y por eso escuchamos menos música en la radio, porque la música ahora se está escuchando desde plataformas digitales” dijo el intérprete de éxitos como Salsa con coco, Pa’ lo coquitos, La faldita, entre otros.
Diferente a lo que muchos piensan, el veterano artista Dioni Fernández, fundador de El equipo, dijo que el merengue no es un género que está abandonado, y que desde su apreciación hay un cambio generacional que ha afectado a los géneros tropicales en sentido general (refiriéndose al merengue, salsa y bachata), no solo al merengue.
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“El cambio generacional ha afectado mucho a los géneros tropicales, porque la juventud tiene preferencia por otros tipos de música, al cual le llaman ahora urbano, una sombrilla que tiene de todo, reggaetón, R&B, rap, etc.
A partir de ahí veo esto, no como un problema, sino como algo que ha sucedido, porque son productos de la sociedad, los cambios sociales”, dejando claro que el merengue sigue produciendo dinero, gracias a las orquestas que tienen historia y un gran repertorio.
“Los grupos musicales que tienen mucha música, están tocando a buenos precios y la gente lo paga y lo consume, porque hay historia, y estamos viviendo en la época de la nostalgia y eso está pasando con todos los géneros musicales, incluyendo la balada, el pop, el rock”, explicó.
Enfatizó nueva vez que “el merengue sigue en una posición buena, porque produce dinero aquí, en Puerto Rico, Colombia, y donde quiera que lo pongan, no es un género musical que está abandonado, ¡No!, lo que pasa es que se consume por gente más mayor. Aunque hay jóvenes que les gusta”.
Congelado en tiempo
Desde el punto de vista del maestro Ramón Orlando, el merengue está igual, y lo único novedoso que ha pasado con éste, es que artistas internacionales hayan grabado algunos temas a ritmo de este género, a diferencia del merengue típico del que ha habido una explosión de juventud haciendo lo que ha calado en ese segmento de la población.
“¿Qué le ha pasado al merengue? Pues que unos cuantos artistas internacionales en los últimos dos años han grabado una canción en versión merengue, pero después por otro lado el merengue permanece igual… porque el merengue tiene un génesis, un epicentro que es República Dominicana, y en República Dominicana, hasta hoy, no tenemos un fenómeno en el merengue de orquesta, diferente al merengue típico, que esos si están al día, porque tienen los fenómenos entre los jóvenes, como: Urbanda, El Blachy, entre otros.
Entonces, el merengue esta igual, es una pena que estemos celebrando un día del merengue, no sé por qué, pero está bien, para que falte que sobre, pero el merengue esta igual”.
Aclaró que Manny Cruz y Rafely son artistas que tiene mucho tiempo, “y que son el resultado de lo que se hizo mucho tiempo atrás, pues ellos pertenecieron a orquestas”, dijo, destacando posteriormente que el merengue se ha congelado en el tiempo.
Punto de vista empresarial
Raphy D’ Oleo, empresario artístico, manifestó a Qué Pasa! que la celebración de este día ubica al género en una posición donde la apariencia pesa más que la realidad.
“Los tres pilares que sirven de fundamento a cualquier negocio, siguen intactos en el negocio de la música: moderada producción discográfica, escasa difusión en los medios tradicionales y equivocado mercadeo, disminuyendo la demanda con elevada oferta, producto de abusivas tarifas de las principales agrupaciones artísticas”, dijo D’ Oleo.
Asimismo, deseó que “este día sirva para hacer un alto en el camino y analizar fríamente lo que ocurre. Si los líderes del merengue no reflexionan, el futuro del género seguirá siendo oscuro”.