La versatilidad como jugador de Michael de la Cruz y sus oportunos batazos han sido de suma importancia para los Tigres del Licey esta temporada.

En la victoria de anoche de los Tigres, 4 por 2, frente a los Gigantes del Cibao, De la Cruz, quien jugó en la inicial, se casó con la gloria al pegar doble remolcador en la parte baja del octavo episodio, que puso delante en el encuentro a los azules.

La línea de dos bases de De la Cruz al jardín izquierdo rompió el empate existente a dos vueltas.
Michael, quien regularmente se desempeña como receptor, esta temporada ha accionado tanto en la primera base como en la intermedia, ofreciéndole al dirigente José Offerman la ventaja de tenerlo regularmente en la alineación por versatilidad.

“Le dije a Offerman que donde me necesite ahí estaré”, expresó tras la victoria De la Cruz, quien aseguró que “yo daré el cien por ciento”.

El buen porcentaje para embasarse que registra De la Cruz con .414 señala la razón del porqué Offerman lo mantiene en juego. Se ha embasado en 17 de los 19 partidos donde ha visto acción.

Otro punto que ha favorecido a De la Cruz es la baja cantidad de veces que se ha ponchado en lo que va de campaña, 8 veces en 70 visitas al plato.

Para De la Cruz su accionar en el cuadro no es nada nuevo, al revelar que previo a firmar se desempeñaba como campocortista.

“Son viejos recuerdos que vienen y con el trabajo de los coaches los resultados están saliendo bien”, manifestó.

Offerman resaltó la valía de De la Cruz, al destacar su capacidad y disponibilidad de jugar múltiples posiciones.

“Este es un juego de resultado y el resultado que Michael está brindando lo hace merecedor de darle la oportunidad”, consideró el capataz de los 23 veces campeones nacionales.

Offerman valoró el hecho de que la versatilidad de De la Cruz le hace el trabajo más fácil.
“Tratamos de poner la mejor alineación cada día y con la ofensiva que nos está dando (De la Cruz) merece estar allí”, dijo Offerman.