El nuevo director del hospital Francisco Moscoso Puello, con apenas un mes en el cargo, ya batalla con una ruidosa crisis que desafía su gestión. Rafael Camilo García denunció que pequeños grupos internos, al parecer molestos por los controles que dice se han adoptado, bloquean sus decisiones para mejorar los servicios a los usuarios.

Camilo García explicó que las denuncias de desabastos de medicamentos y alimentos no solo son inciertas, sino que se corresponden con una campaña para empañar su gestión, aunque la subdirectora del centro admitió que que tal cosa era cierta, ero que se superó.

En lugar de aprobación, las regulaciones, controles de gastos de innecesarios y organización de los servicios han encontrado, según el director, una fuerte oposición interna.

Con la atmósfera que se respira en el país nada se puede descartar, aunque lo ideal sería que las propias autoridades, el Colegio Médico Dominicano, los gremios de enfermería y otros efectúen una investigación para determinar la realidad del hospital. Sería deplorable que intereses ajenos al centro sean utilizados para ensombrecer los servicios del sector salud.

El director citó que unos 830 empleados de las áreas médica y administrativa, a quienes no les corresponde almuerzo, han objetado las restricciones que ha dispuesto para sanear el gasto. Por el bien de los pacientes, los conflictos en el Moscoso Puello tienen que superarse.