Los tres muertos y siete heridos en una balacera durante un teteo en un barrio de San Francisco Macorís es otro mal signo sobre la seguridad y el principio de autoridad.

La fiesta se efectuaba en violación del toque de queda, pero la balacera, que se investiga, genera mucha inquietud. Se habla que personas desde una motocicleta en marcha dispararon contra los participantes en el teteo por motivos que tendrán que aclararse.

No se sabe si los autores de los disparos fueron civiles o agentes policiales, pero tampoco la identidad de las personas que participaban en la fiesta, salvo los muertos y heridos.

El caso tiene muchas preguntas sin respuestas. El director de la Policía, Edward Sánchez González, anunció una investigación para determinar si hubo negligencia en la actuación del cuerpo durante el suceso.

Respecto a los teteos se ha denunciado que se efectúan a la vista de los agentes e incluso que en muchas ocasiones cobran peaje para hacerse de la vista gorda.

El trágico suceso desafía el principio de autoridad, además de plantear la necesidad de fortalecer la vigilancia para hacer respetar las medidas sanitarias contra el coronavirus y el toque de queda.