Santo Domingo.- En este 2023, el mes de noviembre cerró dejando una estela de luto y dolor en República Dominicana tras los fatídicos sucesos que provocaron pérdidas irreparables a muchas familias.

El más reciente hecho que causó consternación, ocurrió en Quita Sueño de Haina, en San Cristóbal, cuando una patana cargada de cemento chocó un autobús de transporte público, llevándola hasta un precipicio donde terminó aplastándolo con sus pasajeros a bordo.

Unas 13 personas perdieron la vida, mientras otras 17 resultaron heridas y fueron llevados a diferentes centros de salud. Tres se mantienen en estado delicado y unas 8 fueron dadas de alta, según el Servicio Nacional de Salud (SNS).

Integrantes de grupos de emergencia trasladan el cuerpo de una de las víctimas del accidente entre un camión de carga y un autobús, que dejó al menos 13 muertos y más de una docena de heridos, en Quita Sueño, Haina. EFE/Orlando Barría

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Diez días atrás, el sábado 18, un disturbio tropical rememoró aquella funesta noche del 4 de noviembre de 2022, superando en daños y muertes las consecuencias de las intensas lluvias que azotaron diferentes puntos del país.

Unas 11 provincias agrícolas sufrieron daños significativos, siendo la parte sur del país la más afectada, de acuerdo con el Ministerio de Agricultura.

Sin embargo, lo más traumático fue que unas 30 personas, según el informe final del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) fallecieron en diferentes circunstancias como ahogamiento, asfixia, electrocutados y aplastados por estructuras que colapsaron durante el paso del fenómeno atmosférico.

Nueve de esas víctimas perdieron la vida por el derrumbe de un muro lateral en el paso a desnivel de las avenidas 27 de Febrero y Máximo Gómez, tras quedar atrapados dentro de sus vehículos.

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En Manoguayabo, Santo Domingo Oeste, la cifra de muertos fue más alta. Las calles de esa localidad quedaron anegadas, quitándoles la vida al menos a diez personas más.

Las víctimas restantes murieron a consecuencia de crecidas de ríos o ahogadas en inundaciones de ríos y cañadas en las provincias Duarte, Hermanas Mirabal, San Cristóbal y Azua.

También en La Altagracia, Barahona, San José de Ocoa y el sector La Zurza, en la capital.

Más de 37.000 personas tuvieron que ser desplazadas, unas 779.531 personas quedaron sin acceso a agua potable y más de 7,400 viviendas afectadas.

Gloria Ceballos, directora de la Oficina Nacional de Meteorología, declaró que el territorio recibió 431 mm de lluvia, un 62 por ciento más que los 266 mm que golpearon el Distrito Nacional en 2022.

“431 (milímetros) una lluvia extrema para el área de Santo Domingo, no habíamos tenido esta cantidad de precipitación en 24 horas”, dijo Ceballos en declaraciones a la prensa.

En tanto, el presidente Luis Abinader anunció que se necesitarían al menos 8 mil millones de pesos de presupuesto estatal para reparar los daños dejados por las lluvias.

Río Fula

La noche del siete de noviembre varias personas fueron arrastrasdas por la crecida del río Fula, provincia Monseñor Nouel, en momentos que disfrutaban del balneario, resultando cinco de ellas fallecidas por ahogamiento.

El director provincial de la Defensa Civil, Juan Carlos Velázquez, identificó a los occisos como Jade Contreras Vásquez, de 13 años; Yimery Yanquis Vásquez, de 29; Cheily Yamiles Pérez, de 25 años, quienes residían en Santo Domingo Este y en Sabana Perdida, respectivamente.

También fallecieron Adonis Custodio Mata, de 25 años de edad, morador del municipio de Constanza e Isauly Martínez, de 29 años, cuyo cuerpo fue hallado al día siguiente.

Otras tragedias

Los medios de información recogen otros hechos ocurridos en noviembre de este año, que dejaron muertos de por medio. Hace una semana, también en Quita Sueño, Haina, una patana cargada de arroz aplastó un grupo de vehículos y mató a dos personas.

El pasado 20 de noviembre, el choque de dos motocicletas causó la muerte de cinco jóvenes en edades comprendidas entre los 16 y 18.

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Un accidente entre un carro y una motocicleta, en la carretera Sosúa-Cabarete, el sábado 4, le quitó la vida a un hombre de 61 años de edad, su hijo de 14 años, la conductora del carro y un haitiano. Otra persona quedó herida.

El día anterior, murieron carbonizadas dos personas que viajaban en un Hyundai Sonata, que se incendió en el sector la Gran Parada, en la carretera Puerto Plata-Montellano.