El Gobierno pondrá a circular en diciembre cincuenta mil millones de pesos, de los cuales $31 mil millones corresponden a inversiones en infraestructura y desembolsos para construcción de escuelas y estancias infantiles, y el resto, $19 mil millones, al pago de sueldos y salarios.
A esa cifra sin precedentes que circulará durante el último mes del año se agrega otra árgana de dinero que aportará el sector privado en nómina regular, sueldo 13, bonificaciones y pago a suplidores, por lo que la enorme masa circulante ayudará a que la economía cierre en 2013 con un crecimiento superior al 3%.
En esos $50 mil millones que según el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, circularán en diciembre, no figuran los 600 millones de dólares ($25,530 millones) que el Gobierno tendría que abonar a la fatídica factura eléctrica, ni el valor de certificados y bonos que Banco Central y Ministerio de Hacienda tendrían que redimir.
Si, como dice el funcionario, el déficit fiscal de 136 mil 300 millones de pesos, se ha reducido a $42,300 millones, lo que significa un ajuste fiscal de más de 94 mil millones, entonces puede decirse que el Gobierno ha hecho magia con el ingreso y el gasto público.
El cambio positivo que el ministro Peralta dice experimenta la economía con un crecimiento de 6,6% en octubre y 13% en noviembre, todavía es imperceptible para la mayoría de la población, aunque se admite que el Gobierno ha logrado estabilidad macroeconómica a pesar del garrotazo que significa un ajuste fiscal de más de un 3% del PIB.
Llama la atención que de los $50 mil millones que el Gobierno pondrá a circular en diciembre, solo $19 mil millones (que son mucho también) será en sueldos y salarios, por lo que resulta muy significativo que en un mes circulen $31 mil millones en el renglón de inversión pública.
Las enormes partidas públicas y privadas que estarán en manos de la población y de agentes económicos en los últimos 30 días del año, equivalen a casi un 4% del PIB, cifra sin precedente, que sin duda dará un impulso importante a las actividades económicas.
Lo menos que se puede aconsejar a los destinatarios de esa enorme masa de dinero es que se aprovisionen de pan para mayo, porque diciembre no es ni puede ser un mes que sirva de modelo sobre cómo será el comportamiento de la economía en 2014. Es como oasis en medio del desierto y nada más.
