Aunque los terrenos de La Barquita Vieja, en la ribera este del río Ozama fueron declarados como zona protegida mediante el decreto 199-16 y pasados al Ministerio de Medio Ambiente, que crearía el Parque Ecológico Fluvial, hasta ahora nada se ha hecho y la zona es utilizada para depositar escombros, como se observa en esta foto de hoy, pese a que fue reforestada por el Jardín Botánico Nacional.