La migración en la región se ha convertido en uno de los grandes dolores de cabeza para los países fronterizos. República Dominicana tiene el problema con los haitianos; México con los centroamericanos y Estados Unidos lo tiene prácticamente con el continente.
Con relativa excepción de los países del cono sur, en la región la meta de los migrantes es Estados Unidos. Pero ese movimiento se ha convertido en un instrumento de presión para México, que es la vía que más utilizan los migrantes para ingresar de forma ilegal a Estados Unidos.
La situación ha llevado al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador a convocar un encuentro de cancilleres para elaborar una propuesta que será presentada al gobierno estadounidense. Obrador tiene prevista una reunión con el presidente Joe Biden en noviembre próximo.
Aunque han fracasado otras iniciativas, una propuesta común puede servir para una estrategia contra esa migración que lleva a miles de personas a desafiar toda suerte de riesgo para ingresar de manera ilegal a Estados Unidos. López Obrador es uno de los interlocutores más calificados para abordar la problemática.