La procuradora general de la República, Miriam Germán, no tardó en rechazar la queja del director de Migración sobre la supuesta falta de apoyo del Ministerio Público en el proceso para detener y deportar a indocumentados.

Tras el desmentido de la jefa del Ministerio Público compete ahora a Alcántara documentar los casos en que se le ha negado apoyo para operaciones contra presuntos residentes ilegales en el país.

La queja del director de Migración llegó hasta el presidente Luis Abinader, quien, como si se tratara de diferencias personales, dijo que buscaría un encuentro entre ambos funcionarios.

Al rechazar el entorpecimiento denunciado por el director de Migración compete a este presentar pruebas o simplemente retractarse.

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No se descarta que la urgencia de Migración en algún operativo chocara con los protocolos institucionales para efectuarlos, pero tampoco que en algún momento surgieran sus inconvenientes.

Si Alcántara se hubiera tomado las molestias de exponer a la procuradora Germán los inconvenientes con que dice ha tropezado es seguro que hubieran sido afrontados.

Ahora está en una disyuntiva, porque si carece de pruebas concretas de su denuncia entonces quedará con la cara larga.

Miriam Germán enfatizó en que es totalmente falso que el Ministerio Público no coopere con Migración, como denunció su director al inspeccionar la instalación de un centro de detención en Dajabón, en las requisas contra supuestos residentes ilegales en el territorio.