Los últimos incidentes con inmigrantes haitianos tornan más relevante la afirmación del ministro de Defensa, Carlos Díaz Morfa, de que cuidar la frontera es la responsabilidad de los cuerpos armados.

Es bien sabido que ni siquiera con la construcción de la verja perimetral se impedirá el ingreso de indocumentados, pero los problemas que se presentan a diario demandan por lo menos más celo en la vigilancia.

Vehículos transportando haitianos sin papeles han sido detenidos en el territorio por inspectores de Migración, lo que sugiere que de alguna manera se las han arreglado para ingresar al país.

Esa desagradable realidad plantea por lo menos dudas sobre cuán segura y vigilada esté la frontera con Haití. No solo las pandillas se han convertido en un desafío. También las decenas de haitianos que se las arreglan para ingresar al territorio de forma ilegal.