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¿Qué tan mal andan las cosas en Meta?

¿Qué tan mal andan las cosas en Meta?

Dicen que a cada cual le llega su hora eventualmente, y desde hace meses parecería que esto está pasando en Meta, la compañía conocida hasta octubre de 2021 como Facebook y cuyo principal negocio se desarrollaba alrededor de las redes sociales y la mensajería, con Facebook, Instagram y WhatsApp a la cabeza.

El cambio de Facebook a Meta obedecía a varias situaciones, empezando por los escándalos que con cada vez mayor intensidad acosaban a Facebook y la mala reputación que se repente se asociaba a cualquier cosa relacionada a esa plataforma y a su fundador, Mark Zuckerberg.

Además de sacudirse esa reputación, el cambio a Meta representaba una suerte de renacimiento al señalar el cambio de dirección desde redes sociales y mensajería a algo más ambicioso y emocionante: el metaverso, combinando realidad virtual y realidad aumentada con experiencias del mundo real.

La presentación del metaverso en octubre pasado fue un éxito desde el punto de vista de que generó mucho debate y mucha atención. Un año después, sin embargo, se perfila como un tremendo fracaso, y eso nos trae a una actualidad caracterizada por pérdidas millonarias, despidos y acciones deprimidas en cuanto a su valor.

Las acciones de Meta están hoy por debajo del 70 por ciento respecto a un año atrás, y en cada reporte se señala al metaverso como el culpable. Pese a esta situación, Zuckerberg insiste en su desarrollo, y eso nos lleva a una crisis de confianza y liderazgo que este martes alcanzó un punto delicado con el rumor de que Zuckerberg planea renunciar como CEO en los próximos meses.

¿Será verdad que Zuckerberg va a renunciar del imperio que construyó? Un oficial de comunicaciones de Meta se ha apresurado a negar el rumor, pero entonces ocurrió que las acciones de Meta subieron en respuesta a la posible renuncia. Esto, por sí solo, dice mucho.

Falso o no el rumor, es un hecho que tanto Meta como Zuckerberg no están en su mejor momento, y mientras esto ocurre, se hacen despidos masivos y hay reportes de inversionistas desencantados con Zuckerberg por lo que se considera falta de concentración y enfoque.

Muestra de que las cosas andan realmente mal es que Portal, la pantalla inteligente que Meta sacó años atrás cuando aún era Facebook, ha sido descontinuada. Igual suerte corrió el proyecto del reloj inteligente que la compañía pretendía sacar al mercado.

En parte, el problema con estos productos era que venían atados a la mala reputación de Facebook/Zuckerberg/Meta, pero también reflejan las situaciones internas de la compañía en lo que respecta a recursos financieros.

Para completar un año terrible, Meta ha sido demandada en Reino Unido por una activista de los derechos humanos, siendo la razón la incesante recolección información personal para fines de publicidad dirigida y la negativa de la empresa de abandonar esa práctica. Asimismo, deberá pagar una multa de 265 millones de euros por deficiencias en la protección de datos.

Como se ve, es una mala fama bien ganada. ¿Sobrevivirán Meta y Zuckerberg a todo esto? Está por verse.