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El 19 del presente mes de febrero, los diarios dominicanos consignaron un gran despliegue en ocasión del Grupo Cisneros, que preside el acaudalado magnate venezolano, nacionalizado español y dominicano, Gustavo Cisneros, de un ambicioso proyecto hotelero a construirse en Miches por US$300 millones, unos RD$30 mil millones, al que asistió el presidente Danilo Medina y el ministro de Turismo, Francisco Javier García.
Gustavo Cisneros Rendiles es el empresario más acaudalado residente en República Dominicana, por encima de Casa Vicini, ahora inicia, Alfonso Fanjul, propietario del Central Romana, José Luis Corripio Estrada (Pepín), José González Cuesta, José Miguel y Roberto Bonetti Guerra, y Ramón Ramos Urias. Su fortuna es evaluada por la revista Forbes en US$ 4 billones, la reserva monetaria de China, y los mencionados, juntos, ni se le aproximan.
Nacido en Caracas, Venezuela el 20 de noviembre de 1945, hijo del inmigrante cubano Diego Cisneros y su esposa Albertina Rendiles, dirige desde 1968 quizás el mayor emporio financiero de Venezuela, aunque mermado por diferencias con el entonces líder de la Revolución Bolivariana, comandante Hugo Chávez Frías, que siguen igual con el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, y que determinaron que Cisneros trasladara el 80% de sus intereses empresariales hacia Estado Unidos, Europa, Asia (China) y América Latina, incluido República Dominicana.
Gustavo Cisneros es avecindado en La Romana, donde construyó la deslumbrante villa Casa Bonita, a un costo de RD$765 millones, un Taj Mahal caribeño, que hospeda entre algunos, a los ex presidentes de EEUU, George Bush padre é hijo, Bill Clinton y su esposa Hillary Rodhan Clinton, y a Henry Kissinger.
Además de poseer la ciudadanía de su país, Gustvo Cisneros Rendiles posee la de España y la dominicana, que obtuvo el 15 de marzo de 2014 entregada personalmente por el presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario Márquez, conforme ilustra Listín Diario del siguiente día, sin entenderse para que disponer de tres ciudadanías, caso insólito.
Un empresario y personaje internacional como Gustavo Cisneros Rendiles, aparte de su trascendencia en el mundo financiero, es imposible que se contentase con solo eso, y ordenó escribir dos biografías de su vida, cuando las biografías se escriben luego de concluir las vidas de sus protagonistas, post mortem, a los escritores Pablo Bachelet, Gustavo Cisneros.
Un empresario global, Editorial Planeta, 2004, y a José Angel Rodríguez, Los Cisneros. Rostros. Rastros de una familia (El Viso, 2015), presentada el 16 de octubre de 2015 en la Real Academia de la Historia de España, conforme reseña el madrileño diario Del País del 17 de octubre de 2015, que le dedicó tres cuartos de página. La primera reposa en mi biblioteca, no así la segunda.
Gustavo Cisneros heredó un consorcio financiero creado por su padre Diego en Venezuela, vinculado originalmente a medios de transporte, evolucionando a Organización Cisneros, comunicación, turismo, banca, bebidas y alimentos, con extensiones en Brasil, Chile, Europa y Asia (China).
Gustavo Cisneros trabó migas con los presidentes venezolanos Rafael Caldera, Carlos Andrés Pérez, es decir, la llamada “conchupancia venezolana”, y en principio con Hugo Chávez, que no prosperó por universos diferentes entre el connotado empresario y el controversial comandante boina roja.
Gustavo Cisneros es “enllave” de Felipe González desde que fue presidente del Gobierno Español; de los expresidentes de EEUU George Bush padre é hijo; del inefable canciller Henry Kissinger, del ex presidente Leonel Fernández y es de presumir, del presidente Danilo Medina.
En 2010, el influyente diario The New York Times distinguió a Gustavo Cisneros y a su esposa Patricia, mejor conocida en el jet set internacional como Patty, reputada notoria coleccionista de artes plásticas, como los personajes de ese año, un galardón preciado, buscado y soñado por las celebridades de todos los formatos públicos del mundo.
En su época de oro, que no la actual, Gustavo Cisneros conformó el holding Organización Cisneros que creó las empresas Pepsi Cola, de la que fue concesionario en Venezuela y Brasil; Helados Tío Rico; Televisa; Televisión Venezolana que inauguró el 27 de febrero de 1961; Genoplast; D, Ocoa Distrtibutor; Radiovisión; Canal de Unión Bank; concesionario de Pizza Hunt; Evenflo & Spalding; Yukery; Unidad Móvil Color (l988); Caracol TV; Pueblo Xtra, entre otras muchas, todo un emporio empresarial gigante, como nunca antes y mucho menos en una Venezuela con una economía por el suelo con una inflación record mundial de un y 75%, y comprando gasolina a Estados Unidos ediante su empresa Citgo, disponiendo de las reservas probadas de hidrocarburos más grandes del planeta.
