Pocos periodistas que hacen opinión pública sobre deportes se han atrevido a decir la verdad acerca de la situación de nuestros atletas con miras a los Juegos Centroamericanos y del Caribe que deberán realizarse en el país del 24 de julio al 8 de agosto.
¿Y cuál es la verdad? Muy simple: nuestros atletas no estarán en las mejores condiciones para representar al país en ese evento multideportivo que deberá recibir a más de 6, 500 atletas de diferentes países.
Aunque desde el año pasado el Ministerio de Deportes entregó 43 millones al Comité Olímpico Dominicano para los procesos clasificatorios de las federaciones para los Juegos Panamericanos Junior 2025 que se celebrarán en Asunción, la cantidad de atletas clasificados está muy por debajo con relación a la primera versión de Colombia.


Hay que informar, además, que ya el ministro de Deportes, Kelvin Cruz, ha erogado los recursos para los fogueos de algunos atletas clasificados, sin embargo, las estadísticas que disponemos son muy preocupantes, alarmantes se podría decir. Basta manifestar que, para la versión de Colombia, la República Dominicana clasificó 188 atletas y en estos momentos en que escribo estos párrafos, solamente tenemos clasificados 78, en espera de natación y tenis que pueden aportar algunas clasificaciones.
En los deportes de conjunto tendremos a Voleibol masculino y femenino, sala y playa, baloncesto 3×3. Importa recordar que en esta ocasión no estarán presentes: béisbol, boxeo y boliche que estuvieron en Colombia en la justa pasada.
Si quieren tener una idea más clara y comprobar que ciertamente es una situación crítica, pues les digo que, en atletismo, el deporte rey por excelencia, solamente tenemos tres atletas clasificados. ¿Es válida o no la preocupación?
Sé que este movimiento deportivo está lleno de ‘’científicos’’ y personas que creen poseer la verdad absoluta, pero el deber me obliga a fijar mi posición. José Monegro, presidente del Comité Organizador, Kelvin Cruz, ministro de Deportes y Felipe Vicini, deben de olvidarse del Comité Olímpico Dominicano, y trabajar directamente con los federados que estén en disposición de hacerlo, pues se percibe a leguas que el presidente del COD, Garibaldy Bautista, no tiene control de los integrantes de esa entidad y es harto conocido que algunos de sus miembros, hace tiempo que, con su actitud, están apostando al fracaso de los juegos.
¿Cuándo van a despertar las autoridades oficiales y el Comité Organizador de los Juegos Centroamericanos y del Caribe?
Es hora de que asuman el control e integren a muchos voluntarios de buena fe que quieren colaborar sin pensar en don dinero.
Dicho está.
Ramón Rodríguez
centrodeidiomaswashington@gmail.com