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Donald Trump

Pierde juicio

 

El crecimiento de la economía (3% en lo que va de año), el principal activo del presidente Donald Trump, no impidió que los republicanos perdieran la Cámara de Representantes en las masivas elecciones del martes en Estados Unidos. No caben falsas interpretaciones.

La derrota no fue total, pues los republicanos conservaron el control del Senado, donde habían asegurado 51 escaños frente a 45 de los demócratas. Aunque pueden minar la gestión del polémico gobernante, los resultados no son como para hacer proyecciones sobre las votaciones de 2020.

Tiene que recordarse que los dos últimos presidentes demócratas Bill Clinton y Barack Obama perdieron el control de la Cámara de Representantes, pero pudieron reelegirse sin problemas.

En el caso de Trump el problema puede presentarse con la profundización de las investigaciones de la injerencia rusa y sobre la agenda legislativa.

La oposición legislativa también plantea para Trump un valladar para el desenfado y el autoritarismo que han marcado su ejercicio del poder. El gobernante podrá jactarse de su liderazgo con la reelección y la victoria de candidatos que impulsó, pero la pérdida de la Cámara de Representantes plantea muchas interrogantes sobre su gestión.

Hay muchos otros aspectos de gran importancia en la votación, como la elección por primera de vez de dos mujeres indígenas como diputadas y un gobernador gay, pero los resultados legislativos son los que más pesan en el juego de poder.

El Nacional

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