Mientras más lejos se está de la capital son más frecuentes y peligrosas las violaciones a la Ley de Tránsito de República Dominicana, como muestra esta foto tomada en la carretera Barahona-San Juan, donde dos menores transitan a bordo de una motocicleta sobrecargada de víveres y agua, sin placa ni cascos, como si se tratara de un desafío a la misma muerte, o quizás, ajenos al peligro que implica su imprudencia.