NUEVA YORK, The Athletic.- El comisionado Rob Manfred dijo el miércoles que planea presentar una propuesta al comité de competencia de las Grandes Ligas de Béisbol que implementaría el sistema automatizado de bola-strike en la MLB en 2026.

A menos que haya un cambio de opinión dentro del grupo de Manfred, es probable que ABS llegue a las Grandes Ligas el próximo año. La oficina de la liga cuenta con suficientes votos en el comité de 11 personas —que también incluye representantes de los jugadores y un árbitro— para lograr lo que desea.

Los árbitros humanos seguirán tomando la gran mayoría de las decisiones sobre strikes, pero los equipos comenzarán cada partido con dos impugnaciones a la decisión del árbitro. Los árbitros entonces recurrirán a un sistema tecnológico que la liga ha probado durante años en las ligas menores y en los entrenamientos de primavera de las ligas mayores este año. Los equipos conservan la impugnación si se revoca la decisión.

“Creo que vamos a explorar la posibilidad de cambiar ese proceso y veremos qué resulta al final”, dijo Manfred en la sede de la MLB. “Creo que los equipos tienen una actitud muy positiva hacia el ABS.

Saben, tengo ese sistema poco científico que uso —mi tráfico de correo electrónico— y tengo la clara impresión de que el uso del ABS en los entrenamientos de primavera ha hecho que la gente sea más propensa a quejarse por correo electrónico sobre las decisiones de bolas y strikes, en mi opinión, haciendo referencia a la necesidad del ABS. Eso es totalmente cierto, totalmente cierto”.

“Como lo han hecho en el pasado, los jugadores revisarán cualquier cambio de reglas propuesto y brindarán sus comentarios y experiencias en el campo a través del comité de competencia”, dijo Kevin Slowey, director gerente de servicios para jugadores de la Asociación de Jugadores de Béisbol de las Grandes Ligas, en un comunicado.

La tecnología empleada en ABS no imita con exactitud la zona de strike humana, ya que los árbitros, en promedio, cantan bolas y strikes de forma diferente según el conteo: una zona más estrecha en 0-2, por ejemplo, y una más amplia en 3-0. Sin embargo, Manfred no indicó ninguna preocupación pendiente sobre el funcionamiento del sistema, aparte de la reacción de los jugadores.

“Mi mayor preocupación es trabajar en el proceso e implementarlo de una manera que sea aceptable para los jugadores”, dijo Manfred. “Siempre habrá detalles que debamos resolver, y quiero que sientan que respetamos el proceso del comité y que se expresaron plenamente las preocupaciones sobre el sistema y que se intentó abordarlas antes de seguir adelante”.

Los jugadores del comité de competición se han opuesto casi unánimemente a los cambios en las reglas de juego de Manfred. La relación entre dueños y jugadores se volverá cada vez más delicada la próxima temporada, con el vencimiento del convenio colectivo después de la temporada 2026. Sin embargo, Manfred indicó que no iba a actuar con cautela en cuanto a los cambios en las reglas debido a las inminentes negociaciones laborales.

La MLB ha tenido durante mucho tiempo el poder de implementar cambios en las reglas de campo que quiera, pero en el CBA actual, que entró en vigencia en 2022, la liga recibió el derecho de implementar cambios con un aviso más corto: 45 días después de una propuesta.

“Negociamos el derecho a hacer este tipo de cambios en las reglas”, dijo Manfred. “Desde nuestra perspectiva, fue una parte muy importante del acuerdo. Todos entendieron cuáles son las reglas. … A diferencia de la disposición anterior, existe un proceso que se sigue y que te da la oportunidad de evaluar y hablar sobre lo que debería suceder con los jugadores. Así que soy menos reticente al respecto.

Antes, me sentía un poco aprensivo con el año previo a la negociación. Ahora ya no me siento así.

La MLB también está probando un sistema de revisión de swing en las menores esta temporada. No se sabe cuándo lo probarán los jugadores de Grandes Ligas. Manfred indicó que es poco probable que se pruebe en los entrenamientos de primavera de las Grandes Ligas el próximo año debido a la posibilidad de que todos aún se estén adaptando al ABS.

“Aún no hemos tomado una decisión sobre el check-swing”, dijo Manfred. “Intentamos pensar secuencialmente en lo que viene. Creo que tenemos que superar el obstáculo de si hacer o no el ABS antes de complicarnos con un desafío aparte en un turno al bate, ¿no? Piénsalo: son dos sistemas diferentes operando al mismo tiempo. Tenemos que analizarlo bien”.