Kigali, (EFE).- La Fuerzas Armadas de Ruanda acusaron este lunes al Ejército de la vecina República Democrática del Congo (RDC) de bombardear su territorio, causando varios heridos, y pidió a un organismo regional que investigue el incidente.

“La Fuerza de Defensa de Ruanda (RDF) ha solicitado al Mecanismo Conjunto de Verificación Ampliado (EJVM) que investigue los bombardeos transfronterizos en territorio ruandés por parte de las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC)”, afirmó el Ministerio de Defensa ruandés en un comunicado.

El EJVM es un organismo establecido por la Conferencia Internacional de la Región de los Grandes Lagos que investiga incidentes de seguridad en sus doce Estados miembros, que incluyen a Ruanda y RDC.

El Gobierno ruandés explicó que este lunes por la mañana “los proyectiles de las FARDC alcanzaron los sectores de Kinigi y Nyange en el distrito de Musanze, que también limita con el sector de Gahunga en el distrito de Burera, hiriendo a varios civiles y dañando propiedades”.

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“La situación en el área es normal y la seguridad está garantizada. Los heridos están recibiendo tratamiento y las autoridades están evaluando el alcance de los daños”, afirmó el portavoz del Ejercito ruandés, coronel Ronald Rwivanga.

Rwivanga agregó que Ruanda “ha solicitado una investigación urgente por parte del EJVM” y que las autoridades de su país “también están involucrando a sus homólogos de la RDC sobre el incidente”.

La tensión entre ambos países ha aumentado desde el pasado marzo, cuando el grupo rebelde Movimiento del 23 de Marzo (M23) atacó posiciones del Ejército congoleño en el noreste de la RDC, cerca de la frontera con Uganda y Ruanda.

El Ejército de la RDC acusó entonces a las Fuerzas Armadas ruandesas de colaborar con el M23, extremo que rechaza Ruanda.

El M23 se creó el 4 de abril de 2012, cuando soldados de las FARDC se sublevaron por la pérdida de poder de su líder, Bosco Ntaganda, procesado por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra; y debido a supuestos incumplimientos del acuerdo de paz del 23 de marzo de 2009, que da nombre al movimiento.

El grupo exigía renegociar ese acuerdo firmado por la guerrilla congoleña Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP) para su integración en el Ejército, a fin de mejorar sus condiciones.

El CNDP, formado principalmente por tutsis (etnia que sufrió en gran medida el genocidio de Ruanda a manos de los hutus en 1994), se constituyó en 2006 para -entre otros objetivos- combatir a los hutus de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), grupo refugiado en las selvas del Congo tras el genocidio ruandés. El M23 consiguió ocupar en 2012 durante dos semanas Goma, capital de la provincia congoleña nororiental de Kivu del Norte.

Entonces, la ONU acusó al M23 de contar con el apoyo económico-militar de Ruanda e incluso de recibir órdenes directas de altos funcionarios del Ejército ruandés.

Finalmente, la presión internacional empujó al M23 a retirarse de Goma e iniciar conversaciones de paz con el Gobierno congoleño.

El este de RDC lleva más de dos décadas sumido en un conflicto avivado por las milicias rebeldes y los ataques del Ejército, pese a la presencia de la misión de paz de la ONU (MONUSCO), que tiene más de 14.000 efectivos.