Kiev, (AP).- Los bombardeos de las fuerzas rusas golpearon varias áreas en el este y el sur de Ucrania (en Jersón y Kryvyi Rih) durante la noche, mientras los equipos de servicios públicos continuaron una lucha para restaurar la energía, el agua y la calefacción después de los ataques generalizados en las últimas semanas, dijeron los funcionarios este domingo, informa Ap.
Con la persistente nevada que cubre la capital, Kiev, este domingo, los analistas predijeron que el clima invernal -que trae consigo un terreno congelado y condiciones de lucha agotadoras- podría tener un impacto creciente en la dirección del conflicto, que ha hecho estragos desde que las fuerzas rusas invadieron Ucrania hace más de nueve meses.
Pero por el momento, ambos bandos estaban empantanados por las fuertes lluvias y las condiciones fangosas del campo de batalla en algunas zonas, dijeron los expertos.
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El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW ), un grupo de expertos que ha seguido de cerca los acontecimientos en Ucrania, dijo que los informes de ambas partes indicaban que la fuerte lluvia y el barro han tenido un impacto pero la congelación más amplia que se espera a lo largo de las líneas del frente en los próximos días podría tender un impacto en la evolución del conflicto.
“No está claro si alguna de las partes está planeando o preparando activamente la reanudación de las principales operaciones ofensivas o contraofensivas en ese momento, pero los factores meteorológicos que han estado obstaculizando tales operaciones comenzarán a levantarse”, dijo en una nota publicada el sábado.
El ISW dijo que las fuerzas rusas se estaban atrincherando más al este de la ciudad de Jerson, de la que fueron expulsadas por las fuerzas ucranianas hace más de dos semanas, y que continuaban con el “fuego rutinario de artillería” a través del río Dnipro.
