COD: ¿Nueva modalidad de chantaje?-
‘’Lo demasiado hasta Dios lo ve’’. Solo así se explica que Franklin Mirabal, que casi nunca escribe sobre temas olímpicos, haya tenido que establecer con responsabilidad que el presidente del Comité Olímpico, Antonio Acosta, Colin, ‘’ está actuando muy mal’’ con relación a los Juegos Bolivarianos.
El amigo Franklin califica como un maltrato al ministro de Deportes, Francisco Camacho, el hecho de que el Comité Olímpico Dominicano, haya decidido hacer un préstamo para los Juegos Bolivarianos, enviando una señal equivocada de que el Ministerio de Deportes no está cumpliendo con su deber.
La Real Academia Española acepta los conceptos de: intimidación psicológica, verbal, racial, física entre otras. Pienso que, con la actitud del COD, los dominicanos podemos proponer a esa institución que acepte el concepto de: Intimidación Deportiva, pues en el fondo, pareciera como que estamos en presencia de una nueva modalidad de chantaje.
¿Cuál es la realidad sobre Los Juegos Bolivarianos? El pueblo dominicano, que paga con sus impuestos todos estos eventos, debe saber que estos no son unos juegos clasificatorios, solamente ecuestre iría por clasificación en la modalidad de salto. La República Dominicana está simplemente como invitada a esta justa, que, si bien es importante para nuestros atletas, no tiene carácter obligatorio, ni forma parte de nuestro ciclo olímpico.
La realidad es que, desde la primera reunión para estos fines, realizada el sábado 12 de febrero, se acordó que irían 278 atletas, la misma que participó en Los Bolivarianos de Santa Marta y que habría un orden de prioridad. Tengo los datos a mano: el Ministerio de Deportes ha cumplido con todo lo acordado en términos económicos.
¿Por qué hacer este ruido innecesario? ¿por qué entrever que el Ministerio de Deportes no ha cumplido? ¿Por qué querer duplicar la cantidad de atletas? Simple: quieren un mayor presupuesto, pues están acostumbrados a las buenas dietas en dólares como las mariposas a la luz.
El COD está en todo su derecho de alegar que no buscaba hacer daño al ministro Camacho, lo que no tiene derecho, es a contraer deudas millonarias innecesarias que finalmente, salen de los bolsillos de los dominicanos.
Los directivos del COD y de manera especial su presidente, Antonio Acosta, deben saber que dirigen una entidad, cuya membresía debe refrendar la solicitud de esos millones adicionales, innecesarios por demás. ¿Hasta cuándo estaremos con estos sobresaltos con este bendito COD?
Por: Ramón Rodríguez
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