Abdiel David Frías López es un niño afortunado que está vivo y sonriendo, saltando todo el día de los brazos de la madre y su abuelito, en el sector Los Mina, donde vive. Con menos de dos años de, ya le han practicado dos cirugías de corazón abierto.
Su madre, jovencita, apenas 20 años, está feliz de tenerlo a su lado después de sus tensos días entre pasillos de hospitales y el riesgo de los procedimientos que le han salvado la vida. Yo estoy feliz con ese niño, dice, al cargarlo, abrazarlo y besarlo.
Abdiel David es uno de los pacientes operados por gestiones de la Fundación Corazones del Cibao, de Santiago, una institución sin fines de lucro dedicada a tratar y gestionar cirugías a pacientes de escasos recursos con diferentes cardiopatías de todo el país.
Esa entidad, que preside el médico santiaguero Juan Ramírez, trabaja con apoyo y colaboración de Salud Pública, hospital infantil Doctor Arturo Grullón, Internacional Childrens Heart Foundation (ICHF), el Club Rotario Santiago Monumental, Distrito 4060 Rotary Internacional y la Fundación Vanessa.
La vida en un hilito
Desde que nació, el 10 de enero del 2012, Abdel David, tuvo la vida sostenida muy frágilmente de la mano de la Divinidad y los médicos que le diagnosticaron una transposición congénita de las venas del corazón a los 10 días de nacido, que impedía que a la sangre fluir adecuadamente y transportar oxigeno necesario a los pulmones y otros órganos.
Con horas en el mundo, algo raro notaron los médicos que le atendieron en un centro privado de la zona oriental, en la Provincia Santo Domingo, y lo refirieron al hospital infantil Robert Reid Cabral.
Allí recibió estudios y atenciones especializadas, que indicaron procedimientos y cirugías que, presupuestado por los familiares, conllevaban gasto de 4 millones de pesos.
En ell Reid Cabral me hablaron de una fundación en Santiago que operaba esos casos, para decirlo en las propias palabras de la abuela, Marisol Martínez, y de inmediato se puso en contacto con Corazones del Cibao para la coordinación.
Las venas de Abdel estaban tan desgastadas que no permitían adecuada oxigenación a los pulmones.
Nuevas batallas
En el hospital infantil Dr. Arturo Grullon, de Santiago, tras una operación de corazón abierto, duro 24 horas en la unidad de cuidados intensivos con su pechito abierto a plena luz, porque se requería seguimiento a un sangrado sospechoso.
Pero todo lo fue superando Abdiel David. Y tras dos cirugías de corazón abierto, varios procedimientos y las manos bondadosas de los médicos, Fundación Corazones del Cibao y las demás instituciones que apoyan en la labor social, el niño desarrolla su vida normal, en el sector Los Mina, en la capital dominicana.
Se la pasa corriendo y riendo el día entero, dice Rosmery Frías Martínez, su joven madre, de 20 anos, quien agradece a Corazones del Cibao y salvar la vida de su pequeño.
Corazones del Cibao
Fundación Corazones del Cibao, sin sin fines de lucro, desarrolla un programa de cirugías cardíacas de alto costo y complejidad.
En 10 años, han sido tratados 1,321 niños con cardiopatías severas, procedimientos de alto costo y alta complejidad.
La preside elmédico santiaguero Juan Ramírez, quien explicó que la labor incluye valuación pre quirúrgica, preparación para la cirugía, corrección quirúrgica, cuidados postquirúrgicos y seguimiento.
Al concluir con estos casos, los especialistas sienten la satisfacción de haber contribuido con dar un regalo de vida a cada uno de esos niños y terminar con la angustia de una familia sin recursos, que podría ver a su niño morir por una anomalía cardíaca, comenta.
Estadísticas
Los patrones de alimentación y estilo de vida de los dominicanos mantienen altas las estadísticas de enfermedades cardiovasculares.
El 35 por ciento de los dominicanos sufre hipertensión, la obesidad general es de 26.6 por ciento y la diabetes la sufre 510 por ciento.
La obesidad sigue mayor en la mujer (29%) que en el hombre (21.7%). El sobrepeso fue de 31 por ciento y la obesidad visceral de 64.4.
Hipertensión, obesidad y diabetes son tres factores determinantes para el surgimiento de enfermedades cardiovasculares, íntimamente ligados a mal sana alimentación y sedentarismo.
Los datos están contenidos en el Estudio factores de riesgo cardiovascular y síndrome metabólico en la República Dominicana (Efricard II).