Les confieso que las cosas que acontecen en este país siempre me asombran, como que este 24 de Abril, una fecha que honramos, un grupúsculo paramilitar que se hace llamar “antigua orden”, que nadie me ha podido explicar que quiere decir, realizará una manifestación frente al Palacio Nacional.
Digo que me sorprende porque no me imaginaba que ese grupo, fiel a sus postulados “nacionalistas” iba a organizar una manifestación contra la masiva presencia norteamericana en el país, que abarca desde la lengua (hasta el último pulpero le ha puesto a su colmado “Ramón’s supermarket”; hasta la música, la moda y lo que es más preocupante, la desintegración de los valores familiares con la droga, relaciones amorosas, filiales, y religiosas.
Y lo que es más sorprendente aún, que Interior y Policía les haya dado el permiso, dada la estrecha colaboración que existe entre nuestro gobierno (“Hemos salido bien parados de la guerra de aranceles”, dijo Abinader) y, nuestra favorable situación frente a la administración de Trump.
Esto quiere decir que el joven que ahora aparece al frente de la “Antigua Orden” no es tan analfabeto como se asume, aunque no se haya graduado de bachilller, y se ha puesto a estudiar qué significa el 24 de abril para el pueblo dominicano.
A saber, y lo repito por si los otros miembros no lo saben:
El 24 de abril conmemoramos la revuelta de un grupo de militares constitucionalistas contra el gobierno que derrocó al único presidente elegido libremente después de la dictadura de Trujillo: Juan Bosch, y por la reposición de la Constitución del 1963, la más democrática en la historia del país.
Esa Constitución, adoptó muchos artículos de la de Cadiz, entre ellos el derecho de la mujer a educarse y a trabajar; la protección de la mujer en el embarazo; su derecho a la igualdad de salarios con el hombre por la misma tarea, en el plano laboral; y la protección y educación de la infancia.
También abogaba por el derecho a la tierra de los campesinos, hasta el 1963 despojados de sus tierras por la dictadura de Trujillo, que les recuerdo era dueña de más de un 80 por ciento de todos los bienes del país, porque Trujillo era un cuatrero y un ladrón, además de un asesino.
58,000 dominicanos fueron asesinados por la dictadura trujillista, y contra esa dictadura luchó don Juan Bosch y miles de dominicanos aquí y en el exilio. El 24 de abril es pues una conmemoración de la Revolución y rechazo de la intervención norteamericana, y si se la contamina con el racismo y el falso nacionalismo se prostituye, y el Gobierno e Interior y Policía serán responsables.